Actualizado 22/08/2009 14:02

Tensión étnica fue un factor en votación Afganistán: enviado

Por Adam Entous

KABUL (Reuters/EP) - El presidente afgano y su principal rival, quienes han clamado victoria en la elección presidencial, garantizaron a funcionarios estadounidenses que respetarán el resultado de la votación, pese a temores de disturbios étnicos, dijo el sábado el enviado de Washington.

El enviado de Estados Unidos a Afganistán y Pakistán, Richard Holbrooke, se reunió con Karzai y el ex ministro de Relaciones Exteriores Abdullah Abdullah en Kabul el viernes, un día después de que se realizaran las elecciones presidenciales en medio de hechos esporádicos de violencia, a pesar de las amenazas de los talibanes de interferir el proceso.

Ambos bandos dijeron el viernes que están rumbo a ganar suficientes votos como para conseguir más del 50 por ciento necesario de los votos para evitar un potencialmente desestabilizador balotaje en octubre.

La elección es una gran prueba para Karzai luego de ocho años en el poder, así como para la nueva estrategia regional del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, quien envió miles de soldados adicionales para derrotar a los talibanes y sus aliados islamistas y estabilizar Afganistán.

Cuando se le preguntó si temía que los principales candidatos inciten a sus partidarios en caso de que el resultado sea disputado, Holbrooke respondió: "Ellos dijeron que no lo harían".

"Ellos están planteando sus propias perspectivas, pero todos dijeron que respetarían el proceso", dijo Holbrooke a periodistas que viajaron junto a él a Kabul. Reiteró que Washington no tiene un candidato ni un resultado favorito.

Los resultados oficiales preliminares no se esperan hasta dentro de dos semanas.

Observadores de la elección dijeron que una segunda ronda entre Karzai, de la etnia pashtun, y Abdullah, quien tiene el respaldo de los tayikos en el norte, podría dividir al país y que el desacuerdo sobre el resultado podría llevar a disturbios.

"Todos entienden que hay un tema étnico en el país", dijo Holbrooke. "Es un factor, no es una preocupación. ¿Es un factor que nos revuelva el estómago? No, pero es un factor", dijo.

En Washington, Obama elogió la votación como un paso en la dirección correcta. Pero advirtió que la violencia de los talibanes podría continuar mientras se conozcan los resultados oficiales.

"Durante los últimos días, especialmente ayer, hemos visto actos de violencia e intimidación de los talibanes, y podría (...) haber más en los próximos días", dijo Obama en la Casa Blanca.

Las encuestas realizadas antes de la elección muestran que Karzai tiene la ventaja, pero no la suficiente como para evitar una segunda vuelta.

Funcionarios afganos y estadounidenses respiraron con alivio luego de la relativamente pacífica elección, después de un dramático aumento de la violencia en las semanas previas a la votación.

El recuento comenzó después de que los locales de votación cerraron y la Comisión Electoral Independiente de Afganistán ha pedido paciencia a medida que avanza el proceso, diciendo que sólo ese organismo está en posición de entregar resultados oficiales.

Karzai y Abdullah se atribuyeron la victoria basándose en las observaciones no oficiales de miles de trabajadores de campaña en los 6.200 locales de votación.

Los resultados preliminares se esperan para el 3 de septiembre, y los resultados finales serían entregados dos semanas después, aunque hay indicios de que el resultado se podrían demorar al menos otra semana.

Observadores e internacionales han dicho que la votación estuvo marcada por graves problemas, pero que hasta el momento resulta creíble.