Por Robert Boczkiewicz
DENVER, EEUU (Reuters/EP) - Un piloto del aeropuerto de Colorado en el centro de una investigación estadounidense sobre un supuesto complot de ataques con bomba, quedó el lunes bajo custodia de las autoridades, al menos hasta la realización de una nueva audiencia prevista para más tarde en la semana.
Una magistrado estadounidense dijo que Najibullah Zazi, quien fue arrestado el sábado junto a su padre, Mohammed Wali Zazi de 53 años, deberá regresar a la corte el jueves para una nueva audiencia.
El joven Zazi, un afgano de 24 años que según las autoridades admitió haber tomado cursos para fabricar bombas en un campo de entrenamiento de Al Qaeda en Pakistán, fue acusado junto a su padre y un imán de Nueva York de mentir al FBI.
Las autoridades federales están investigando si Zazi y otras personas estaban planeando hacer estallar un vagón de metro o estaciones de trenes en Nueva York, o si había otros complots.
Funcionarios aún tienen que identificar blancos específicos o determinar cuán cerca estaban los sospechosos de perpetrar algún asalto. Podría haber más arrestos y procesamientos, dijeron.
En tanto, un portavoz del Departamento de Seguridad Interior de Estados Unidos reconoció que se emitió una alerta "para recordar a las autoridades del transporte que se mantengan vigilantes".
El juez Craig Shaffer concedió al mayor de los Zazi la libertad bajo fianza por 50.000 dólares, pero deberá quedar bajo arresto domiciliario y será objeto de monitoreo electrónico.
"El Gobierno aún está recolectando evidencia y entrevistando a testigos", dijo el fiscal adjunto Tim Neff durante una audiencia en Denver para Zazi y su padre.
Previamente, Ahmad Wais Afzali de 37 años, un imán de la ciudad de Nueva York, quedó bajo custodia de las autoridades al menos hasta el jueves luego de una audiencia en Brooklyn.
Una computadora portátil que fue confiscada del automóvil rentado del joven Zazi, que contenía una imagen de instrucciones escritas a mano sobre cómo fabricar y manejar artefactos explosivos, es una pieza clave de evidencia, de acuerdo a una declaración jurada del FBI.
La declaración indica que el joven Zazi mintió cuando dijo a agentes del FBI que nunca había visto el documento, que fue rastreado por las autoridades hasta tres correos electrónicos manejados por el joven.