Actualizado 16/09/2009 00:43

Unasur busca claridad en seguridad ante armamentismo

Por Nelson Bocanegra y Alexandra Valencia

QUITO (Reuters/EP) - Ministros de la Unasur buscaban el martes consenso para hacer más transparentes sus políticas de seguridad, en medio de preocupaciones por una eventual carrera armamentista en la región y la disputa por un acuerdo militar entre Colombia y Estados Unidos.

El primer escollo surgió cuando el vicepresidente de Venezuela, Ramón Carrizález, acusó a Colombia de negarse a informar sobre el acuerdo que firmará próximamente con Estados Unidos y dijo que eso podría frenar consensos del encuentro.

La reunión de los 12 miembros de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) tiene como reto concretar acuerdos para intercambio de información militar, en medio de los temores que desató el controvertido plan entre Bogotá y Washington para utilizar bases del país andino en operaciones antidrogas.

"No hemos visto ni letras grandes ni letras pequeñas y eso por supuesto genera preocupación sobre las verdaderas cláusula de este acuerdo", dijo Carrizález a periodistas.

Para la delegación de Venezuela, los detalles del acuerdo que también demandan otras naciones podría dar transparencia y consecuentemente confianza a la región.

En respuesta, Colombia dijo estar dispuesta a entregar la información del pacto y rechazó las acusaciones de Caracas.

"Colombia está dispuesta a lo que se llama la simetría, queremos que todo el mundo ofrezca garantías, información y abra sus puertas a todos los temas que hemos planteado", dijo el ministro de Defensa colombiano, Gabriel Silva.

CARRERA ARMAMENTISTA

Colombia pidió además que se trate el tema de la compra de armamento y acuerdos de cooperación con terceras naciones.

"Es muy importante que se discuta de manera amplia, comprensiva y en detalle las compras de armas a terceros países, las garantías y mecanismos de confianza sobre ese tema", dijo el canciller colombiano, Jaime Bermúdez.

Venezuela, que impulsa con Rusia un financiamiento para la compra de armamento, dijo que sí estaba dispuesta a dar detalles sobre sobre la negociación en el marco de la Unasur.

"No tenemos ningún impedimento de mostrárselo a Unasur con todos los detalles porque la confianza comienza por la transparencia", dijo Carrizález.

Desde Bogotá, el presidente Alvaro Uribe, el principal aliado de Estados Unidos en la región, aseguró que su Gobierno no ha contemplado iniciar una carrera armamentista y expresó que los equipos comprados por su país están destinados exclusivamente a combatir la guerrilla y el narcotráfico.

Por su parte, Brasil también está negociando acuerdos de compra de armamento con Francia.

Anticipándose a ellos, Ecuador y Chile fortalecieron su flota aérea recientemente, al tiempo que Bolivia ha anunciado planes para comprar además de aviones de combate, helicópteros franceses y rusos.

Para el canciller ecuatoriano, Fander Falconí, no se está desarrollando una carrera armamentista y la región "debe centrarse donde están los problemas (...) como pobreza".

MENOS GASTO MILITAR

La reunión de los funcionarios de alto rango de los países fue convocada luego de que la cumbre de presidentes de la Unasur, el pasado 28 de agosto en Argentina y en la que el punto de discusión fue el plan colombo estadounidense, concluyó sin resultados, en medio de largos discursos.

En ese encuentro, Alan García, presidente de Perú, que a su vez mantiene un diferendo limítrofe con Chile, criticó la carrera armamentista en la región y dijo que los recursos deben más bien ser destinados a problemas sociales de los pueblos.

"Perú propone que el Consejo de Defensa Sudamericano estudie cada país y haga públicos los montos de los gastos militares de mantenimiento (...) así como la transparencia de las nuevas compras. Debemos poner las cartas sobre la mesa", dijo García en una carta remitida a los ministros de Unasur.

"El secreto entre nosotros sólo beneficia a los grandes vendedores de armas y a sus comisionistas corruptores", agregó en la misiva, en la que también advirtió que en los últimos cinco años los países de la región han gastado unos 23.000 millones de dólares adicionales en nuevos armamentos.

En medio de la reunión, Estados Unidos expresó su preocupación por la compra de armamento por parte de Venezuela y la potencial carrera armamentista en la región.

"Hemos expresado preocupación sobre la cantidad de compras venezolanas de armas. Sobrepasan a las de todos los países de Sudamérica y desde luego crecen las interrogantes sobre si van a llevar a una carrera armamentista en la región", dijo la secretaria de Estado, Hillary Clinton, en Washington.

La reunión de la Unasur se lleva a cabo mientras Quito mantiene rotas sus relaciones diplomáticas con Bogotá y persiste un enfrentamiento entre Chávez y Uribe por el acuerdo militar con Estados Unidos.

(Con Colaboración de José Llangarí y de Marco Aquino en Lima. Editado por Silene Ramírez)