Se pregunta qué pasaría en España o en cualquier país europeo si una cadena actuara como RCTV durante el golpe de 2002 o el paro petrolero
MADRID, 8 May. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Telesur, el venezolano Andrés Izarra, espera que la cadena multiestatal latinoamericana pueda empezar a emitir en Europa a partir del mes de septiembre o al menos durante el último trimestre del año, a la espera de recibir la correspondiente autorización de la Unión Europea (UE) para comenzar a difundir.
"Creo que en septiembre. Ya he dado dos fechas pero finalmente se caen por cuestiones burocráticas. Diría que en el último trimestre estaremos emitiendo en Europa", afirmó Izarra en una entrevista a Europa Press con motivo de su visita a España para continuar las negociaciones con distribuidores y operadores de televisión cerrada.
Los principales directivos de Telesur, empresa que transmite desde hace casi dos años un canal de televisión de información 24 horas por satélite y que aspira a convertirse en la CNN latinoamericana, se encuentran estos días en Madrid dando a conocer la cadena en una fase inicial de conversaciones con todos los distribuidores y operadores.
En palabras de Izarra, se trata de un producto que para España puede ser de gran atractivo por la relación histórica que tiene con América Latina. La idea de Telesur es mostrar una visión de la región desde la propia América Latina, con una señal informativa que se produce en la región, con su propio talento y visión, "mucho más cercana" de los procesos que están ocurriendo en esa parte del mundo.
Además, continúan los trámites ante la Unión Europea para obtener todos los requerimientos legales necesarios para poder empezar a distribuir la señal en Europa, para lo cual llevan varios meses de trabajo "arduo, intenso y lento", según precisó el que fuera ministro de Comunicación del Gobierno de Hugo Chávez entre 2004 y 2005.
CAMPAÑA DE "MENTIRAS Y MANIPULACION" DE GRANIER
Por otro lado, sobre la decisión de no renovar la licencia de emisión al canal Radio Caracas Televisión (RCTV), presidido por el empresario Marcel Granier, el actual presidente de Telesur aseguró que el Gobierno se ha limitado a cumplir el mandato constitucional de generar una televisión de servicio público.
"La última concesión se le dio en 1987 por 20 años. Ahora se vence y no se renueva, lo cual no quiere decir que se haya cerrado. El Gobierno, como no hay más lugar en el espacio radioeléctrico, usará esa frecuencia para desarrollar un canal de servicio público de acuerdo al mandato de la Constitución", precisó.
En este punto, tras recordar que ya no es un portavoz del Gobierno y que habla desde su condición de periodista, Izarra criticó la actuación de RCTV durante el intentona golpista en abril de 2002, una cadena en la que estaba trabajando como gerente de producción de los informativos y de la que renunció en pleno golpe.
Así, denunció que RCTV abogue por la libertad de expresión cuando en los sucesos de 2002 censuró la información sobre la reacción del 'chavismo' y el pueblo venezolano. "Esos días tenía una clara línea informativa de apoyo a la dictadura que se impuso esas 48 horas. La línea informativa que se nos impuso fue 'cero chavismo en pantalla".
Izarra aseguró que en estos momentos Granier está detrás de una nueva edición de la campaña que hizo durante el golpe de Estado "mintiendo, manipulando y tergiversando" para convertirse en víctima e intentar sacar rédito económico a favor de sus intereses que, según dijo, "están claramente definidos en Venezuela".
"¿QUE PASARIA EN ESPAÑA?"
"Lo que vivimos en Venezuela fue como si TV1, La 2, Cuatro, La Sexta o Telecinco sólo trasmitieran mensajes en contra del Gobierno en sus espacios promocionales. Yo quisiera ver qué pasaría en España o en cualquier país de Europa si un operador de telecomunicaciones hiciera eso", se preguntó el presidente de Telesur.
Tras resaltar que en ningún momento se ha hablado de no renovar la licencia a otros canales privados como Globovisión o Venevisión, Izarra recordó que en su país el 78% de las concesiones de televisión en VHF son privadas y el 82% en UHF también, por lo que la presencia del Estado en el espacio radioeléctrico es "minoritaria".
Por eso está convencido de que quienes defienden la tesis de falta de pluralidad en Venezuela o tienen "intereses malintencionados, como el señor Granier", o no conocen la realidad del país. "Basta un poquito de investigación para darse cuenta de que en Venezuela hay total pluralidad y absoluta libertad de expresión", asegura tajante.
"Yo diría que este Gobierno ha dado herramientas para democratizar la información y permitir que nuevos actores se incorporen al mundo de la comunicación impulsando a productores independientes. Venezuela tiene una situación oligopólica en el mercado de las comunicaciones donde dos o tres actores usufructuaban el bien público", recordó.
Por último, resaltó el boom de los medios comunitarios en su país y defendió su independencia a pesar de que muchos creen que sólo son voces del Gobierno. "Que alguien intente controlar en un país a 118 emisoras de radio en manos de las comunidades o disponer una línea editorial a esos grupos", concluyó.