Actualizado 24/03/2014 21:05

'San Romero de América', un mártir que murió por los pobres

Salvadoreños realizaron una peregrinación para recordar la muerte de Mons Romero
Foto: REUTERS

SAN SALVADOR, 24 Mar. (Notimérica/EP) -

   'San Romero de América', así lo llaman los salvadoreños al Monseñor Óscar Arnulfo Romero, que tuvo el valor de pedir en nombre de Dios el cese de la represión contra el pueblo salvadoreño y eso le costo la vida. Hoy, a 34 años de su muerte espera su canonización y un aeropuerto en El Salvador lleva su nombre.

   Monseñor Romero nació en 1917 en Ciudad Barrios, zona oriental del país, en el seno de una familia humilde, fue el segundo de ocho hermanos. A los 13 años, manifestó sus primeros deseos de convertirse  en sacerdote.

   En 1937, ingreso al Seminario Mayor de San José de la Montaña en San Salvador, luego fue enviado a Roma para continuar sus estudios en Teología. Allí experimentó el dolor de la Segunda Guerra Mundial. En 1942 es ordenado sacerdote a los 24 años de edad.

   De vuelta en El Salvador, dirigió las primeras parroquias en el departamento de La Unión y San Miguel, donde tuvo que consolar a los campesinos víctimas de la presión de militares y policías. En medio de injusticias, represión e incertidumbre, Monseñor Romero, a los 59 años, fue nombrado Arzobispo de San Salvador, el 3 de febrero de 1977.

   En sus homilías dominicales denunciaba la injusticia social y las represiones y asesinatos por parte de los 'regímenes del mal'. En su defensa de los pobres contra los abusos de la Junta Militar que gobernaba el país, creó una oficina de defensa de derechos humanos y abrió las puertas de la Iglesia para refugiar a los campesinos que huían de la represión.

   A consecuencia del apoyo a los pobres, fue calumniado y acusado de revolucionario marxista. Asimismo, fue señalado de ser el causante de todos los males de El Salvador por el coronel Jaime Abdul Gutiérrez, que encabezaba la Junta Militar.

   "Les pido, les ordeno en nombre de Dios el cese de las represiones", este pedido de Monseñor Romero al Gobierno hizo que organizaran su asesinato de forma silenciosa. El 24 de marzo de 1980, cuando celebraba una misa en la Capilla del Hospital La Divina Providencia, en San Salvador, fue asesinado por un francotirador.

   Durante su entierro, aproximadamente 100.000 personas asistieron a la Plaza Cívica para acompañar a Monseñor Romero. Aún en medio de ese dolor que el pueblo salvadoreño vivía, fuerzas policiales y militares detonaron explosivos y realizaron disparos causando muertos y heridos.

   Tras la muerte de Monseñor Romero, se produjo la una guerra civil en la que murieron alrededor de 80.000 personas tanto del ejército como del la guerrilla salvadoreña.

   En 1994, la Arquidiócesis de San Salvador postularon en el Vaticano la causa por la canonización de Monseñor Romero. El proceso de beatificación se ha dilatado en el tiempo, han pasado 20 años y recientemente el Papa Francisco ha desbloqueado el proceso que estaba estancado por muchos años, dio a conocer 'El Faro'.

   Por su parte, el presidente de El Salvador, Mauricio Funes, cambió el nombre del aeropuerto internacional de San Salvador a 'Óscar Arnulfo Romero Galdámez', en conmemoración del 34º aniversario de la muerte del Monseñor.