Actualizado 28/10/2014 14:50

Un 39% más de personas rechazan la ciudadanía de EE.UU

Ciudadanía
Foto: REUTERS

NUEVA YORK, 28 Oct. (Notimérica) -

   El número de estadounidenses que ha renunciado a su ciudadanía aumentó un 39 por ciento en el tercer trimestre de este año en comparación con el mismo período de 2013, una tendencia que parece ser consecuencia de la puesta en vigor de las nuevas normativas sobre la revelación obligatoria de los ingresos obtenidos en el exterior.

   Tal y como señala el Registro Federal, el número de personas que quieren desentenderse de sus pasaportes de Estados Unidos ascendió a 776 en julio, agosto y septiembre, en comparación con las 560 registradas hace un año, según publica la agencia 'Bloomberg'.

   Las nuevas reglas más estrictas sobre activos de confidencialidad que se inició el 1 de julio bajo la Ley sobre el Cumplimiento Fiscal relativa a Cuentas en el Extranjero (FATCA) provocaron que más de los seis millones de estadounidenses que viven en el extranjero renunciaran a sus pasaportes.

   El atractivo de la ciudadanía estadounidense para los expatriados se desvaneció todavía más cuando alrededor de 100 bancos suizos empezaron a entregar datos sobre clientes estadounidenses para evitar ser procesados por ayudar a evadir impuestos.

UNA BÚSQUEDA DE LOS EVASORES DE IMPUESTOS

   EE.UU, el único país cuya Organización para la Cooperación Económica y el Desarrollo grava impuestos a los ciudadanos en cualquier lugar en el que residan, intensificó la búsqueda de evasores de impuestos después de que la sociedad bancaria UBS AG (UBSN) pagara una pena de 780 millones de dólares en 2009 y facilitara datos de alrededor de 4.700 cuentas.

    Al ser rechazados por los bancos suizos y alemanes, más de 9.000 estadounidenses residentes en el extranjero entregaron sus pasaportes en los últimos cinco años.

   FATCA exige a las instituciones financieras estadounidenses que impongan un impuesto de retención del 30 por ciento sobre los pagos realizados a los bancos extranjeros que no estén de acuerdo en identificar y proporcionar información sobre los titulares de cuentas de los Estados Unidos.

   De esta forma, EE.UU podría obtener datos de más de 77.000 instituciones y 80 gobiernos sobre las actividades financieras realizadas en el extranjero por sus ciudadanos.

   El Registro Federal hace pública la lista de todas las personas que han renunciado a su ciudadanía para que "sean tratados como si fueran ciudadanos de Estados Unidos que han perdido la ciudadanía".