Actualizado 05/07/2015 18:19

ACTUALIZA 3-OTAN, cautelosa por conversaciones de alto al fuego, arremete contra Rusia por Ucrania

(Agrega detalles, citas)

Por Adrian Croft y Kylie MacLellan

NEWPORT, Gran Bretaña, 4 sep, 5 Sep. (Reuters/EP) -

- La OTAN demandó el jueves que Moscú retire sus tropas de Ucrania, mientras el presidente de Estados Unidos Barack Obama y sus aliados se comprometieron a apoyar a Kiev y reforzar sus propias defensas contra Rusia en el mayor cambio estratégico desde el final de la Guerra Fría.

Los líderes dejaron en claro en una cumbre en Gales que su alianza militar no utilizaría la fuerza para defender a Ucrania, que no es un miembro de la OTAN, pero planearon sanciones económicas más duras contra Rusia para que cambie su actitud respecto a la ex república socialista.

La reunión de dos días estuvo marcada por el más serio enfrentamiento entre Occidente y Rusia desde la caída del Muro de Berlín hace 25 años y el colapso de la Unión Soviética, así como también por la alarma provocada por el avance territorial de islamistas insurgentes en Irak y Siria.

Funcionarios de Occidente expresaron una profunda cautela sobre los dichos del Kremlin respecto a un inminente alto al fuego en la revuelta de separatistas prorrusos que ya lleva cinco meses en el este de Ucrania, justo cuando la OTAN se reunía y la Unión Europea preparaba nuevas sanciones.

Tales declaraciones previas han resultado ser "cortinas de humo para una continua desestabilización en Ucrania", aseguró el secretario general de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, a periodistas después que los 28 líderes se reunieran con el presidente ucraniano Petro Poroshenko.

"Instamos a Rusia a poner fin a su anexión ilegal y unilateral de Crimea", afirmó Rasmussen. "Llamamos a Rusia a retirar sus tropas de Ucrania y detener el envío de armas, tropas y fondos a los separatistas (...) Le pedimos a Rusia que abandone la confrontación y tome el camino de la paz".

La canciller alemana, Angela Merkel, dijo que Occidente estaba dispuesto a respaldar las demandas con más sanciones, pero también a través de conversaciones con Moscú sobre una solución política.

Poroshenko, cuyas fuerzas han sufrido una serie de contratiempos en la última semana, dijo a periodistas que ordenaría un cese al fuego el viernes si se firma en Minsk un plan de paz propuesto, como se espera.

"Lo único que necesitamos para tener paz y estabilidad son dos cosas: primero, que Rusia retire sus tropas, y segundo, cerrar la frontera", enfatizó, agregando que tenía un cauto optimismo sobre las conversaciones de paz del viernes.

Por su parte, un funcionario militar de la OTAN dijo que Moscú tenía "varios miles" de soldados y cientos de tanques y vehículos blindados en Ucrania. El Kremlin niega que tenga fuerzas combatiendo junto a separatistas prorrusos.

La Casa Blanca dijo que Obama y los líderes de Alemania, Francia, Gran Bretaña e Italia acordaron en los márgenes de la cumbre que Rusia debe afrontar "nuevos costos" por sus acciones.

El presidente de Francia, Francois Hollande, dijo que sanciones más duras de la Unión Europea, que serían adoptadas el viernes, dependerían de los eventos que se produzcan en las próximas horas.

Los líderes de la OTAN también discutieron cómo enfrentar a los militantes de Estado Islámico, que han capturado grandes extensiones de Irak y Siria, y sobre cómo estabilizar a Afganistán cuando sus fuerzas abandonen el país a fin de año.

SIGUEN LOS CHOQUES

Las fuerzas de Poroshenko luchaban para aferrarse al clave puerto de Mariupol en el Mar de Azov, vital para las exportaciones de acero de Ucrania. Se escucharon explosiones cerca de la ciudad, a mitad de camino entre Crimea y Rusia.

El líder ucraniano buscó que sus socios occidentales le den armas y entrenamiento a sus fuerzas armadas, así como apoyo político contra el presidente ruso Vladimir Putin. Insinuó que varios países pertenecientes a la OTAN acordaron entregar equipamiento militar letal y no letal, pero no dio detalles.

Poroshenko evitó hablar en público sobre reactivar la oferta para unirse a la OTAN, algo que volvió a abrir una brecha entre los aliados.

Obama dijo en Estonia el miércoles que la puerta está abierta a los estados que cumplen con los estándares de la alianza militar y "pueden realizar importantes contribuciones a la seguridad aliada", pero Francia y Alemania siguen oponiéndose a admitir a Kiev, por el temor a exacerbar la tensión con Moscú que podría llevarlos hacia una guerra.

El canciller ruso, Sergei Lavrov, resaltó la oposición de su país a que Ucrania se una a la OTAN, advirtiendo que los intentos para terminar con el estatus de no alineado del país podrían dañar la seguridad. Acusó a Estados Unidos de apoyar al "partido de la guerra" en Kiev.

Tras una semana de comentarios desafiantes de Putin, Lavrov dijo que Rusia está lista para tomar medidas prácticas para mitigar la crisis en Ucrania e instó a Kiev y a los rebeldes a prestar atención a propuestas de cese al fuego presentadas por Moscú el miércoles.