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WASHINGTON, 30 dic, 30 Dic. (Reuters/EP) -
- El número de contratos para comprar casas usadas en Estados Unidos creció levemente en noviembre, registrando su primer alza en seis meses y dando una señal de esperanza de que el sector ha comenzado a estabilizarse tras perder el impulso debido a un aumento de las tasas hipotecarias.
La Asociación Nacional de Agentes Inmobiliarios (NAR, por su sigla en inglés) dijo el lunes que su índice de ventas pendientes de casas, basado en contratos firmados el mes pasado, subió un 0,2 por ciento a 101,7.
Los contratos estuvieron un 1,6 por ciento por debajo de los niveles de noviembre de 2012.
Economistas consultados por Reuters pronosticaban que los contratos firmados, que se convierten en ventas al cabo de uno o dos meses, crecerían un 1,0 por ciento.
"Podríamos haber alcanzado un mínimo cíclico porque los cimientos positivos de creación de empleo y formación de hogares probablemente promuevan un nivel razonablemente estable de actividad de contratos en el 2014", afirmó el economista jefe de la NAR, Lawrence Yun.
La NAR también indicó que el tono suave hacia fin de año no debería opacar las mejores ventas en 7 años, aunque afirmó que tasas hipotecarias más altas combinadas con fuertes aumentos de los precios de viviendas probablemente traigan aparejado un crecimiento más modesto de las ventas en el 2014.
"Varios indicadores de vivienda han mejorado recientemente y el incremento muy moderado en ventas pendientes de casas en noviembre es una señal tentativa de que la actividad se está estabilizando, o quizás incluso se está acelerando", comentó Daniel Silver, economista de JP Morgan en Nueva York.
Las ventas de casas han disminuido por un incremento en las tasas hipotecarias, con inversores que anticiparon que la Reserva Federal comenzaría a reducir el nivel de estímulos a la economía estadounidense a medida que la recuperación del país se va afianzando.
Las tasas hipotecarias han subido más de un punto porcentual desde mayo pasado, a casi un 4,5 por ciento.
El banco central dijo este mes que a partir de enero recortará las compras mensuales de bonos en 10.000 millones de dólares, a 75.000 millones de dólares, y que a lo largo del 2014 mantendrá ese ritmo moderado de reducción de los estímulos.
La medida ratificó la confianza de la Fed en el impulso subyacente de la economía de Estados Unidos y ayudó a las acciones a alcanzar nuevos máximos históricos en Wall Street.
"Con la continua alza de los precios de las casas, el mercado laboral recuperándose lentamente, y tasas hipotecarias aún bajas desde una perspectiva histórica, esperamos que el sector inmobiliario siga su camino hacia una recuperación gradual en el próximo año", escribió Gennadiy Goldberg, estratega para Estados Unidos de TD Securities.