Actualizado 15/03/2014 04:48

Inmigrantes latinos confían en que haya menos deportaciones

Inmigrantes Latinoamericanos Ilegales Son Deportados En EEUU Hacia Sus Países
Foto: CARLOS BARRIA / REUTERS

WASHINGTON, 15 Mar. (Reuters/EP) -  

   Grupos latinos y activistas en favor de los inmigrantes han afirmado este viernes que esperan que el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, reduzca las deportaciones de indocumentados tras el encuentro que mantuvieron con él durante casi dos horas y en el que expusieron sus preocupaciones.

   El propio presidente estadounidense anunció el pasado jueves que había decidido revisar las prácticas de deportación para buscar una manera más "humana" de aplicar las leyes de inmigración.

   Esta decisión llegó tras meses de presión por parte de grupos latinos, que se sienten frustrados por los paralizados esfuerzos de Obama para reformar las leyes de inmigración, que tienen por objetivo garantizar la ciudadanía a unos 11 millones de personas que viven de forma irregular en Estados Unidos.

   Entre los activistas que se encontraron con Obama estaba Janet Murguia, presidenta del Consejo Nacional de La Raza, que en un discurso a principios de mes se refería al mandatario estadounidense como "deportador en jefe".

   Murguia dijo entonces a los periodistas que sus "duras palabras" estuvieron justificadas porque la comunidad hispana "está en crisis", con familias que son separadas por las deportaciones.

   "(Obama) nos pidió que trabajáramos directamente con el secretario de Seguridad Nacional, Jeh Johnson, para encontrar maneras realmente más humanas de poder resolver la situación y reducir esas deportaciones siempre que podamos", ha explicado. La primera reunión se llevará a cabo la próxima semana.

   El presidente ha convertido la reforma migratoria en una de sus principales prioridades, incluso aunque su administración ha aplicado agresivamente las leyes existentes, deportando unos 2 millones de personas desde que alcanzó la Presidencia.

   El Senado, con mayoría demócrata, aprobó un proyecto de ley de inmigración, pero los esfuerzos por modificar la legislación se han estancado en la Cámara de Representantes, que es controlada por los republicanos.