VIRGINIA, 10 Ene. (Reuters/EP) -
El gobernador de Virginia Occidental, Earl Ray Tomblin, ha declarado este jueves el estado de emergencia en cinco condados, tras un derrame de sustancias químicas en el río Elk, en Charleston, la capital y la ciudad más grande del estado.
Según ha informado la oficina del gobernador y los funcionarios locales, se está aconsejando a los residentes que no beban agua del grifo, que no se bañen y que no utilicen este producto para cocinar, ya que las posibilidades de que esté contaminado son altas.
De acuerdo con la advertencia a los residentes publicada en la página web del Departamento de Salud de Kanawha-Charleston, "las condiciones indican que hay una alta probabilidad de que se contamine el agua" tras el vertido al río, aunque no hay pruebas de ello todavía.
La prensa local informa que el producto químico se filtró de un tanque de la empresa Freedom Industries, que produce productos químicos para las industrias de minería, cemento y acero. La compañía ha rechazado hacer declaraciones a la prensa por el momento.