Publicado 22/01/2014 17:52

Elecciones al Parlamento UE preocupan en el foro de Davos

Por Paul Taylor y Paul Carrel

DAVOS, Suiza, 22 ene, 22 Ene. (Reuters/EP) -

- El riesgo de un giro a la derecha en las elecciones al Parlamento Europeo en mayo preocupa a los principales ejecutivos del mundo, que temen que los comicios hagan al bloque más difícil de gobernar justo cuando quieren que emprenda reformas.

Un alto desempleo, el cansancio por las medidas de austeridad y un todavía famélico crecimiento ofrecen un escenario perfecto para que los partidos alternativos ganen adeptos en las elecciones.

Algunos críticos pronostican que un grupo de partidos antieuropeos, como el Frente Nacional de Francia o el británico UKIP, el griego Syriza o el holandés Partido de la Libertad podrían llegar a alcanzar un 20 por ciento o más de los escaños.

Eso podría presionar a los principales partidos de la Unión Europea a variar su rumbo y desafiar la capacidad europea para realizar una mayor integración, dados los nuevos poderes que tendrá la cámara sobre la mayoría de las leyes de la UE.

Para los presidente ejecutivos que se reúnen cada año con la elite mundial Davos, las elecciones de mayo suponen un gran riesgo para las perspectivas económicas de Europa, incluso después de haberse evitado una ruptura de la zona euro.

"El riesgo real ha desaparecido. Pero hay un riesgo de que reaparezca este año", dijo Axel Weber, presidente de UBS y ex presidente del Bundesbank, en una sesión en el foro titulada "¿Ha vuelto Europa?".

Weber mencionó como un riesgo el posible auge de los euroescépticos en las elecciones, el cual según dijo podría complicar el proceso político en la UE. "Piensa lo difícil que ha hecho el Tea Party la gobernanza en Estados Unidos", dijo.

Las últimas encuestas muestran que el Frente Nacional francés, contrario a la inmigración, ha ganado apoyos desde las elecciones presidenciales de 2012, en la que su líder Marine Le Pen fue tercera con el 17,9 por ciento de los votos, sus mejores resultados en la primera vuelta.

El francés Pierre Nanterme, presidente ejecutivo de la consultora Accenture, dijo que estaba preocupado por el alto desempleo que alimenta un "aumento de los extremos".

"Estoy muy preocupado por el resultado de las elecciones europeas. Necesitamos ser muy cuidadosos porque si no creamos un entorno más integrador, la gente se va a preguntar cuál es el propósito de Europa", dijo.

El desempleo de la zona euro seguía en un máximo récord en noviembre, el último mes del que hay datos oficiales disponibles, con un 12,1 por ciento de la población activa sin trabajp por octavo mes consecutivo.

En Grecia la tasa es del 28 por ciento y en España alcanza el 26 por ciento.

¿EXAGERACIONES?

Pero el ministro para Europa de Finlandia dijo que el aumento del apoyo a partidos antieuropeos se ha exagerado y no evitará una "mayoría moderada" que siga adelante con la integración europea.

Alexander Stubb, ministro de Asuntos Europeos que anunció la semana pasada su candidatura para el centroderecha en las elecciones de mayo, dijo que esperaba que los partidos euroescépticos de extrema derecha e izquierda obtengan entre un 10 y un 20 por ciento de los escaños en la cámara europea, frente al 12 por ciento que tienen ahora.

"Será menos de lo que algunos esperarían, pero más de lo que tuvieron en el último Parlamento", dijo a Reuters en una entrevista en el Foro Económico de Davos.

Stubb dijo que aún habrá un sólido centro pro europeo para asuntos importantes y dudó de que todos los partidos euroescépticos tengan mucho en común con el Frente Nacional francés o el antislámico Partido de la Libertad de Holanda, de Geert Wilders.

Para Christophe de Margerie, presidente ejecutivo de la petrolera Total, Europa necesita cambiar el modo en que se percibe a sí misma sea cual sea el resultado de los comicios.

"No se lo tome como una provocación, pero creo que Europa debería ser reconsiderada como un país emergente", dijo De Margerie, que añadió que debe "volver a la competitividad".

"Hoy estamos tratando de luchar contra aquellos que hacen a veces el mismo producto más barato. No podemos competir así. Tenemos que aumentar las habilidades de nuestros ingenieros y empleados a todos los niveles y forzarlos a sacar nuevos productos al mercado", manifestó.

"Y también, dejemos de diferenciar entre el sur y el norte de Europa porque, en ese caso, Europa está muerta", añadió.

(Traducido por Redacción de Madrid. Editado en español por Marion Giraldo)