Por Alex Lawler y Peg Mackey
LONDRES, 5 mar, 5 Mar. (Reuters/EP) -
- Irak está recuperando su lugar como el exportador de petróleo de crecimiento más rápido en el mundo, al atraer a clientes que se han visto afectados por las interrupciones del suministro en Libia y, quizás, revivir rivalidades entre miembros de la OPEP por la participación de mercado.
A pesar de que la violencia ha empeorado debido a la guerra en la vecina Siria, Irak -que ya es el segundo mayor productor de crudo de la OPEP- posiblemente registrará uno de los mayores aumentos anuales de su producción en la historia, en momentos en que BP, Exxon Mobil y otras compañías explotan sus yacimientos del sur.
Se espera que Bagdad mantenga, o incluso supere, el veloz ritmo de ventas de crudo alcanzado en febrero, de 2,8 millones de bpd -un aumento de 500.000 bpd respecto del mes anterior-, a medida que se solucionan varios atascos de exportaciones en los terminales de Basora en el sur, desde donde se embarca casi todo el petróleo de Irak.
"Irak está haciendo su mejor esfuerzo por exportar la mayor cantidad posible (de petróleo) y las cosas están mejorando", dijo un funcionario de alto rango de una importante compañía petrolera con operaciones en Irak.
De modo que, después de la pérdida de impulso el año pasado, muchos en la industria esperan un incremento significativo de la producción en el 2014 en el país, que ostenta el quinto puesto entre las mayores reservas de crudo del mundo.
"Creemos que el promedio para el año probablemente será de unos 2,9 millones de barriles de petróleo por día, así que quizás en la última parte del año la cifra podría subir un poco", dijo otro ejecutivo de una petrolera occidental en Irak.
Si Bagdad lograr sostener las ventas de crudo de 2,8 millones de bpd, sus ingresos podrían subir a más de 100.000 millones de dólares con un precio de unos 100 dólares por barril. Las exportaciones promedio por debajo de 2,4 millones de bpd generaron ingresos por 89.000 millones de dólares al país.
El alza de la producción de Irak no ha presionado los precios internacionales del crudo y ha sido bienvenida por otros miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), puesto que compensa la interrupción de los suministros provenientes de Libia y los menores envíos de Irán por las sanciones que enfrenta.