Publicado 18/02/2014 14:24

Irán y potencias comienzan conversaciones sobre acuerdo nuclear final con apagado optimismo

* Ambas partes minimizan expectativas antes de reunión en Viena

* Resultado podría ser cuestión de guerra o paz en Oriente Medio

* Reunión de Viena es vista como primera de varias rondas de conversaciones

Por Parisa Hafezi y Louis Charbonneau

VIENA, 18 feb, 18 Feb. (Reuters/EP) -

- Seis potencias e Irán comenzaron el martes conversaciones para buscar un acuerdo final sobre el disputado programa nuclear en los próximos meses, pese a advertencias de ambas partes de que un acuerdo total podría ser imposible.

El líder supremo iraní Ayatollah Ali Khamenei, el hombre con la última palabra en todos los temas de importancia en la República Islámica, volvió a decir el lunes que las conversaciones entre Teherán y las seis potencias "no llevarán a ningún lado", aunque reiteró que no se oponía a la diplomacia.

Horas después, un alto funcionario de la administración estadounidense también disminuyó las expectativas al decir a periodistas en la capital austríaca que será un "proceso complicado, difícil y extenso" y "probablemente no alcanzaremos un acuerdo como el que deseamos".

Esta es la primera ronda de las negociaciones de alto nivel desde un acuerdo interino del 24 de noviembre que, deteniendo una década de desacuerdos que se encaminaba a un conflicto mayor, logró que Teherán disminuyera algunas actividades nucleares por seis meses a cambio de un alivio limitado de sanciones para ganar tiempo hasta lograr un pacto a largo plazo.

Las apuestas son enormes. Si tienen éxito, las negociaciones podrían ayudar a desactivar muchos años de hostilidad entre Irán -un gigante exportador de energía- y Occidente, aliviar el riesgo de una nueva guerra en Oriente Medio, transformar las relaciones de poder en la región y abrir nuevas oportunidades de negocio para Occidente.

Las conversaciones, que se espera que duren unos dos o tres días, comenzaron cerca de las 1000 GMT del martes en el complejo de Naciones Unidas en Viena.

Las comitivas tenían previsto mudarse luego a un lujoso hotel céntrico donde los negociadores están alojados.

Un portavoz de la jefa de Política Exterior de la Unión Europea, Catherine Ashton, quien supervisa las conversaciones en nombre de las potencias, dijo que las reuniones bilaterales entre las delegaciones estaban en marcha.

Funcionarios occidentales dijeron que las conversaciones buscaban lograr un acuerdo sobre cómo el diálogo debería seguir en los próximos meses y qué temas deberían ser abordados.

"Básicamente estamos poniendo la mesa para las negociaciones", dijo el alto funcionario estadounidense.

El portavoz de Ashton, Michael Mann, dijo a periodistas: "Nadie está esperando un acuerdo final en esta ronda, pero esperamos progresos (...) el objetivo es crear un marco de trabajo para futuras negociaciones".

A pesar de su escepticismo público sobre las posibilidades de alcanzar un acuerdo duradero con Occidente, Khamenei dejó claro que Teherán estaba comprometido con las negociaciones entre Irán y Gran Bretaña, China, Francia, Alemania, Rusia y Estados Unidos.

"Lo que nuestros funcionarios comenzaron, continuará. No abandonaremos. No tengo oposición", dijo el lunes a una multitud en la ciudad de Tabriz frente a cánticos que rezaban "Muerte a Estados Unidos", un estribillo usado desde la revolución islámica de 1979.

Durante una década de diálogo irregular con las potencias, Irán ha rechazado acusaciones de países occidentales de que está buscando desarrollar capacidad para armas nucleares. Dice que el enriquecimiento de uranio sólo busca generar electricidad y tiene fines médicos.

Teherán ha desafiado las demandas del Consejo de Seguridad de que detenga el enriquecimiento u otras actividades de proliferación sensibles, lo que llevó a paralizantes sanciones de Estados Unidos, la Unión Europea y la ONU que han dañado severamente la economía del país miembro de la OPEP.

La aprobación de Khamenei a negociaciones serias con las seis potencias, pese al escepticismo que comparte con seguidores conservadores de línea dura, está impulsada por las deterioradas condiciones económicas de Irán, según analistas y diplomáticos.

Otro factor importante fue la elección el año pasado de un presidente moderado, Hassan Rouhani, quien se propuso superar el aislamiento internacional de Teherán.