Actualizado 04/10/2014 18:58

Martin L. Perl, el Premio Nobel que siempre persiguió sus propias ideas sobre la Física

El profesor Martin L. Perl
Foto: REUTERS

MADRID, 4 Oct. (Notimérica/EP) -

   El físico Martin L. Perl, que ha muerto este martes a los 87 años causa de un fallo cardíaco, "era una de aquellas personas que tenían sus propias ideas sobre la Física" y perseguirlas hasta el final fue lo que le llevó a descubrir el leptón tau, una partícula unas 3.500 veces más pesada que el electrón que le serviría para obtener el Premio Nobel de Física en 1995.

   "Martin era una de aquellas personas que tenían sus propias ideas sobre qué era importante en Física, y él las persiguió y las persiguió insistentemente, y tenía razón", ha recordado el también Premio Nobel Burton Richterm, que supervisó los primeros pasos del trabajo de Perl en la Universidad de Standford, en el Centro del Acelerador Lineal.

    Perl estudió ingeniería química en el Instituto Politécnico de Brooklyn, en Nueva York. De padres judíos y emigrantes procedentes de Europa del Este, el Premio Nobel norteamericano siempre fue animado por su familia a satisfacer sus intereses científicos.

   Después de servir en la Marina mercante y en el Ejército durante la Segunda Guerra Mundial, obtuvo su título en ingeniería química en 1948 en el Instituto Politécnico de Brooklyn. "Estaba aburrido", ha explicado su hijo Jed Perl. Su mujer de entonces fue la que le convención para que estudiara Física en la Universidad de Columbia, a pesar de que sólo tenía un curso básico en mecánica newtoniana, según 'Los Angeles Times'.

   Pero Perl había descubierto su vocación y en 1955 obtuvo el título de doctor en Física por la Universidad de Columbia. Acabó siendo profesor en la Universidad de Michigan y en 1964 se marchó a California a la Universidad de Standford.

   Allí, ahondaría en la investigación de leptones. Se conocen seis tipos de leptones, tres de ellos con carga eléctrica negativa y otros tres sin carga. De los leptones cargados negativamente se habían descubierto el electrón y el muón. Antes del descubrimiento de Perl, los físicos teóricos ni siquiera habían predicho la existencia del leptón tau, el tercero con carga.

EL DESCUBRIMIENTO

   En 1973, Perl se dedicó al estudio de los electrones y de los muones y de las diferencias entre ellos. Mediante colisiones de partículas subatómicas, Perl fue capaz de estudiar estas partículas y los productos que resultaban de las colisiones.

   Dichas colisiones, producían electrones y muones y Perl, que sabía que los muones eran inestables y se desintegraban o descomponían, teorizó que la producción de muones sólo podía provenir de la descomposición de partículas más pesadas que ellos mismos.

   En 1975, tras haber analizado miles de datos, Perl anunció que había descubierto el leptón tau, una partícula unas 3.500 veces más pesada que el electrón.

MÁS ALLÁ DE LA FÍSICA

   Martin L. Perl también estaba profundamente involucrado en los temas sociales de su época y empujó a la Sociedad Americana de Física a tomar una posición en contra de la guerra de Vietnam, una batalla sin éxito que le llevó a la fundación de la asociación de izquierdas de Científicos por la Acción Política y Social en 1969.

   El Premio Nobel era "intenso" en casa, ha explicado su hijo, que ha recordado como su padre trataba de desarrollar su lado más imaginativo con la construcción de juguetes. "Veía ese juego como una preparación para la exploración científica", ha relatado.

   En los últimos años, el físico había llevado ese mismo mensaje a los estudiantes de los países asiáticos, donde la ciencia puede llegar a ser rígida y ortodoxa. "Él les decía que dejaran a su mente deambular y que usaran su imaginación", ha destacado su hijo.

   Perl deja tras su muerte a sus hijos Joseph y Matthew, además de Jed, y a una hija, Anne. También tuvo ocho nietos y una bisnieta.