Publicado 24/03/2014 14:56

Obama inicia conversaciones de emergencia con líderes europeos por crisis en Ucrania

* Rusia endurece control sobre Crimea

* Líderes del G-7 realizan reunión de emergencia en Holanda

* Se contemplan sanciones contra Rusia

Por Justyna Pawlak y Aleksandar Vasovic

LA HAYA/TEODOSIA, Ucrania, 24 mar, 24 Mar. (Reuters/EP) -

- El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, inició conversaciones de emergencia con sus aliados europeos el lunes después de que Ucrania anunció la evacuación de sus tropas desde Crimea ante la mayor presencia de soldados rusos.

Obama, que impuso sanciones más duras a Moscú que los líderes europeos por la toma por parte de Rusia de la península del Mar Negro, buscará respaldo para su postura en una reunión con otros jefes del G-7, el grupo de las siete naciones industrializadas que excluye a Rusia, país que se unió en 1998 al conjunto para formar el G-8.

Desde que se anunció la reunión de una hora del G-7 la semana pasada, Putin ha firmado leyes que completan la anexión de Crimea a Rusia.

En lo que se ha convertido en la mayor confrontación Este-Occidente desde la Guerra Fría, Estados Unidos y la Unión Europea han impuesto prohibiciones de visa y el congelamiento de activos a algunos de los más estrechos aliados políticos y empresariales de Putin.

Sin embargo, hasta el momento se han abstenido de tomar medidas diseñadas para afectar a la economía rusa.

"Europa y Estados Unidos estamos unidos en nuestro respaldo al Gobierno ucraniano y al pueblo ucraniano", comentó Obama luego de reunirse con el primer ministro holandés, Mark Rutte.

"Estamos de acuerdo en imponer un costo a Rusia por sus acciones hasta ahora. El primer ministro Rutte indicó correctamente ayer que las crecientes sanciones provocarán consecuencias significativas a la economía rusa", añadió.

Moscú anexó formalmente Crimea el 21 de marzo, cinco días después de que nuevos líderes regionales prorrusos realizaron un referéndum que arrojó una aplastante mayoría a favor de la unión con Rusia. Kiev y Occidente han denunciado la anexión como ilegal.

Funcionarios occidentales ahora están concentrados en persuadir a Putin de que renuncie a Crimea -un objetivo que parece poco probable- más que en disuadirlo de que no tome otras partes de Ucrania.

En La Haya, los líderes del G-7 -Estados Unidos, Japón, Canadá, Alemania, Francia, Gran Bretaña e Italia- discutirán cómo ejercer mayor presión y a qué costo potencial.

Persuadir a los europeos de que firmen sanciones más duras podría ser un desafío para Obama, dado que la Unión Europea tiene 10 veces más comercio con Rusia que Estados Unidos y es el mayor cliente de petróleo y gas ruso.

Los líderes del G-7 también podrían decidir el futuro del G-8, que es esencialmente el mismo grupo más Rusia. Los jefes del colectivo ya han suspendido las preparaciones para la cumbre del G-8 que organizaría Putin en junio en la ciudad olímpica de Sochi.

Una fuente diplomática de Francia afirmó que los líderes "discutirán cómo este grupo puede o no puede seguir funcionando".

Otro diplomático de la Unión Europea declaró: "El G-8 está muerto, aunque creo que nadie quiere decirlo (...) El punto que todos van a querer mostrar es que estamos todos unidos".