Publicado 06/03/2014 22:03

RESUMEN 2-Crimea vota por unirse a Rusia en nueva escalada de crisis en Ucrania

(Actualiza con comentarios de Obama, detalles; agrega autor)

* Parlamento de Crimea vota a favor de unirse a Rusia

* Una dividida UE busca advertir, no sancionar, a Rusia en la cumbre

* Kerry y Lavrov se reunirán de nuevo en Roma

* Moscú dice esfuerzos de OSCE y NATO no ayudan

Por Luke Baker y Alissa de Carbonnel

SIMFEROPOL, Ucrania/BRUSELAS, 6 mar, 6 Mar. (Reuters/EP) -

- El parlamento de Crimea votó el jueves a favor de unirse a Rusia, y su Gobierno respaldado por Moscú dijo que en 10 días se celebrará un referendo sobre la decisión, en una dramática escalada de la crisis en torno a la península de Ucrania en el Mar Negro.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, lideró la oposición a la propuesta de referendo, y dijo que esto violaría la ley internacional.

El nuevo cambio de la situación para colocar formalmente bajo el Gobierno de Moscú a Crimea, cuya mayoría étnica es rusa y ha sido ocupada por fuerzas rusas, se conoció mientras los líderes de la Unión Europea se reunían en una cumbre de emergencia para examinar mecanismos que permitan presionar al Kremlin a fin de que retire sus fuerzas y acepte la mediación.

La UE condenó las acciones de Rusia en Crimea y las catalogó de ilegales, respaldó la integridad territorial de Ucrania y tomó la decisión menor de suspender las conversaciones con Moscú sobre visados e inversiones. Además, dijo que congelaría activos rusos y que tomaría nuevas medidas si no se logra una solución negociada en poco tiempo.

En una señal a Moscú, Obama adoptó medidas para castigar a quienes amenacen con socavar la soberanía e integridad territorial de Ucrania, ordenando que se congelen sus activos en el país y una prohibición para viajar a Estados Unidos.

Tras una reunión en Roma, el secretario de Estado John Kerry dijo que el ministro de Relaciones Exteriores Sergei Lavrov estaba enviando personalmente a Putin las propuestas para poner fin a la crisis en Ucrania.

"Acordamos estar en contacto para ver si hay una forma de llegar a une mesa de negociación para reunir a las partes para tratar de estabilizar esta situación", dijo Kerry.

El funcionario destacó que la orden ejecutiva firmada el jueves por Obama da un marco legal para imponer sanciones, pero también Kerry deja la puerta abierta para el diálogo.

En tanto, la Armada estadounidense anunció que un destructor con misiles guiados, el USS Truxton, viajaba hacia el Mar del Norte, en lo que fue descrito como una misión de ejercicios anteriormente planeados y no una demostración de fuerza.

El Parlamento de Crimea -una región de dos millones de habitantes- votó unánimemente "para ingresar a la Federación Rusa con los derechos de un ente de la Federación Rusa".

El viceprimer ministro de Crimea, Rustam Temirgalie, cuya región es sede de la base militar rusa en el Mar Negro, en Sebastopol, dijo que el referendo para determinar la anexión a Rusia se celebrará el 16 de marzo.

Agregó que toda la propiedad del Estado sería "nacionalizada", que el rublo ruso sería adoptado como la moneda nacional y que las tropas ucranianas serían tratadas como ocupantes y obligadas a rendirse o abandonar la región.

El anuncio sobre el referendo, que diplomáticos dicen que no pudo hacerse sin el consentimiento de Putin, aumenta las tensiones en la más grave confrontación entre Occidente y Oriente desde el fin de la Guerra Fría.

Las acciones rusas cayeron y el rublo se debilitó aún más después de conocerse la noticia sobre al referendo. La agencia Moody's dijo que la situación era negativa para la calificación crediticia de Rusia.

Lejos de buscar una solución diplomática, Putin parece haber decidido crear hechos en el terreno antes de que Occidente acuerde lanzar medidas en su contra.

En Bruselas, el presidente de la Comisión Europea, Herman Van Rompuy, dio a conocer un plan de tres etapas para resolver la crisis.

Salvo que Moscú lleve adelante pronto negociaciones con Ucrania y un "grupo de contacto" internacional, la UE podría impedir viajes y congelar activos de funcionarios rusos, así como boicotear la reunión del G-8 en Sochi en junio.

Si Rusia toma acciones que desestabilicen más a Ucrania, habría "graves consecuencias" para las relaciones económicas bilaterales, destacó Van Rompuy, sin dar más detalles.

REFERENDO ILEGAL

El nuevo gobierno de Ucrania ha declarado ilegal el referendo y abrió una investigación criminal contra el primer ministro de Crimea, Sergei Askyonov, quien fue designado la semana pasada por el parlamento de la región. El Gobierno ucraniano no reconoce su autoridad ni la del Parlamento.

Un funcionario del Parlamento de Crimea dijo que a los votantes se les preguntará: ¿Debería Crimea ser parte de la Federación Rusa y debería regresar Crimea a la Constitución anterior (de 1992) que da a la región más autonomía?

"De no haber habido constantes amenazas de las actuales autoridades ucranianas ilegales quizás habríamos tomado un enfoque diferente", dijo el vicepresidente del Parlamento, Sergei Tsekov, a periodistas frente a la sede parlamentaria en Simferopol, la principal ciudad de Crimea.

"Creo que hubo una anexión de Crimea por parte de Ucrania, si vamos a llamar las cosas por su nombre. Debido a este ambiente y este sentimiento, tomamos la decisión de unirnos a Rusia. Creo que nos sentiremos mucho más cómodos allí", agregó.

La crisis comenzó en noviembre, cuando el presidente ucraniano Viktor Yanukovich, bajo fuerte presión de Rusia, rechazó apegarse a un amplio tratado con la UE y, a cambio, aceptó un rescate de 15.000 millones de dólares de Moscú. Eso encendió tres meses de violentas protestas en las calles que llevaron a la destitución de Yanukovich el 22 de febrero.

Moscú denunció los eventos posteriores como un golpe de Estado ilegítimo y se negó a reconocer a las nuevas autoridades ucranianas.

Rusia dejó la puerta abierta a la diplomacia bajo sus condiciones, anunciando una reunión el 4 de abril de los ex estados soviéticos reunidos bajo la Mancomunidad de Estados Independientes, entre ellos Ucrania, señalando que será precedida por contactos entre diplomáticos rusos y ucranianos.