Publicado 28/12/2013 13:24

Tropas iraquíes detienen a un legislador suní, mueren cinco personas


RAMADI, Irak, 28 dic, 28 Dic. (Reuters/EP) -

- Las fuerzas de seguridad iraquíes arrestaron el sábado a un destacado legislador musulmán suní en Ramadi, en la provincia de Anbar, en un enfrentamiento en el que murieron al menos cinco personas, dijeron fuentes de la policía.

El violento arresto de Ahmed al Alwani podría inflamar las tensiones en Anbar, de mayoría suní, donde desde diciembre miles de personas han tomado las calles en protesta por lo que ven como una marginalización de su secta por parte del Gobierno del primer ministro Nuri al Maliki, liderado por los chiíes.

Alwani es miembro del bloque Iraqiya -respaldado por los suníes. El legislador ha sido un acérrimo crítico de Maliki y es una figura influyente en el movimiento de protesta.

Fuentes de la policía dijeron que en el arresto de Alwani el sábado se produjo un intercambio de tiros que duró dos horas y que estalló cuando los guardaespaldas y miembros de la tribu del parlamentario se resistieron al arresto, por cargos de "terrorismo", en su casa, en el centro de Ramadi.

Las fuentes dijeron que en la disputa murieron tres guardaespaldas, una hermana y un hermano de Alwani.

"Tropas del ejército con fuerzas especiales de la policía intentaron arrestar a Alwani en su casa, pero se produjo un fuerte enfrentamiento. Cinco cuerpos, incluyendo el de una mujer, fueron llevados al hospital de Faluya", dijo una de las fuentes de la policía.

El teniente general Ali Ghaidan, comandante de las fuerzas en tierra iraquíes, dijo a la televisión estatal que también se había intentado arrestar al hermano de Alwani, Ali, por su presunta participación en un ataque en Anbar en el que murieron soldados iraquíes.

Ghaidan dijo que Ali murió en la refriega y que también murió un soldado iraquí.

"Tratamos bien a Ahmed al Alwani. Le dijimos que teníamos una orden para su arresto, y lo arrestamos", dijo Ghaidan.

La violencia en Irak está en sus peores niveles desde 2006 y 2007, cuando decenas de miles de personas murieron en los enfrentamientos entre suníes y chiíes. Bombardeos, tiroteos y ataques suicidas se producen a diario.

Los hechos del sábado podrían dañar los esfuerzos de Maliki por poner fin a las protestas en Anbar antes de las elecciones de abril.

En un comunicado emitido el viernes por la televisión, el primer ministro dijo que sería "el último viernes" que se permitiría que las protestas y sentadas continuaran.

Muchos suníes en la región podrían ver el incidente como otro ejemplo de lo que ellos ven como represión contra los líderes suníes.

(Información de Kamal Namaa en Ramadi y Ahmed Rasheed en Bagdad; Escrito por Alexander Dziadosz. Traducido por la Mesa de Edición de Santiago de Chile. Editado por Rodrigo de Miguel)