Actualizado 30/01/2014 22:15

Los grupos de autodefensa vigilarán infiltración de criminales

Miembros de los grupos de Autodefensa del estado mexicano de Michoacán.
Foto: REUTERS

MÉXICO DF, 30 Ene. (EUROPA PRESS) -

   Estanislao Beltrán, uno de los líderes de los grupos de autodefensa de Michoacán, ha anunciado que harán controles internos para evitar que miembros de organizaciones "criminales" se infiltren en medio de su proceso de legalización.

   Beltrán ha explicado, en una entrevista concedida este jueves a la televisión mexicana Milenio, que los grupos de autodefensa están verificando que todos los que pretenden sumarse al acuerdo con los gobiernos locales sean realmente "parte del pueblo" y no "criminales".

   "Nosotros lo que hacemos es ir a verificar y darle legalidad. Que sea el pueblo el que se esté manifestando, que no vayan a ser grupos de criminales que estén utilizando nuestro nombre", ha dicho el líder comunitario.

   Interrogado sobre el caso del municipio de Los Reyes, en el que en un primer momento hubo dudas acerca de la naturaleza de los hombres armados, ha aseverado que "fue el pueblo el que se manifestaba contra el crimen organizado". "Nosotros le dimos legalidad", ha remachado.

PASO A LA LEGALIDAD

   Los grupos de autodefensa comenzaron ayer los trámites para pasar a la legalidad, lo que implica unirse a las policías locales y registrar sus armas. Se trata del primer paso para poner fin a la crisis de seguridad en el estado mexicano.

   "Tepalcatepec es el primer municipio que ya llevó a cabo su legalidad con la lista de los compañeros que van a pasar a integrar las defensas rurales", ha indicando Beltrán, adelantando que el próximo será Buenavista.

   En las últimas 24 horas, decenas de miembros de los grupos de autodefensa se han identificado y sometido a pruebas físicas para determinar si son aptos para ingresar en las fuerzas de seguridad. También han registrado sus armas.

   Aunque la mayoría ha acudido con la intención de sumarse a los uniformados en un futuro, otros, en cambio, han ido para dejar definitivamente la lucha armada. "Yo ya estoy mayor para andar de policía", ha dicho Agustín Rangel, ganadero de Tepalcatepec.

   Algunos se han presentado en el municipio para curiosear, porque aún dudan de las intenciones del Gobierno local. "Me voy a esperar, porque si veo que esto no funciona, no me voy a registrar. Me voy a quedar a la expectativa", ha explicado Rafael Esquivel, otro ganadero.

   Beltrán ha aclarado que estos registros no suponen el desarme de los grupos de autodefensa. "Dadas las circunstancias vamos a permanecer a cargo de las armas. Por el momento solo las vamos a registrar", ha subrayado.

ACUERDO CON LOS REYES

   El comisionado para la Seguridad y el Desarrollo Integral de Michoacán, Alfredo Castillo, por otro lado, ha informado de que el grupo de autodefensa surgido en el municipio de Los Reyes finalmente ha aceptado sumarse a la legalización.

   "Este grupo de Los Reyes también se suma a este acuerdo con las instituciones. Ya hay acuerdo", ha anunciado a la salida del encuentro que mantenido con las autoridades locales para abordar la estrategia federal de seguridad.

   Castillo ha revelado que incluso los líderes de este grupo de autodefensa han advertido a sus compañeros de que "ninguna organización podrá volver a tener el más mínimo margen de movilidad, si no es a partir de las instituciones".

CRISIS DE SEGURIDAD

   Michoacán vive una crisis de seguridad desde hace tres semanas, cuando los grupos de autodefensa asaltaron el municipio de Apatzingán, dando lugar a tiroteos, saqueos e incendios, incluso en la Alcaldía, que se saldaron con la muerte de una persona.

   Desde entonces, las también llamadas policías comunitarias han irrumpido en otras muchas localidades, lo que ha obligado al Gobierno de Peña Nieto a desplegar a las fuerzas federales y a crear el cargo de comisario federal de Seguridad de Michoacán.

   El objetivo de los grupos de autodefensa michoacanos es expulsar de la zona a Los Caballeros Templarios, que se han instalado en este estado para controlar este importante punto de la ruta de la droga hacia Estados Unidos, con el consecuente aumento de la violencia.

   En el último año se han multiplicado los grupos de autodefensa, sobre todo en las zonas rurales de México, con el único objetivo de erradicar el crimen organizado, según dicen, ante la pasividad de las autoridades y las fuerzas de seguridad.