LIMA, 25 abr, 25 Abr. (Reuters/EP) -
- El Banco Central de Perú haría en mayo una pausa en los recortes de encaje en moneda local que ha realizado en los últimos cinco meses, debido a que hay un abundante nivel de liquidez, dijo el viernes su presidente, Julio Velarde.
Entre diciembre del año pasado y abril, el organismo rebajó los requerimientos bancarios en soles en forma consecutiva, hasta llevarlos a un 12 por ciento.
Con esto, liberó liquidez por unos 8.500 millones de soles -unos 2.850 millones de dólares- con el objetivo de fomentar el crédito en momentos en que la economía peruana crece por debajo de su nivel potencial de entre un 6 y un 6,5 por ciento.
"El encaje no estamos bajando para mayo", dijo Velarde en conferencia sobre sus perspectivas macroeconómicas.
"Han vencido muchos certificados o CDR que teníamos, que son papeles en soles indexados al tipo de cambio. Al vencer, los bancos están con una abundancia de soles bastante grande", explicó.
Los CDR (Certificados de Depósito Reajustable) son papeles que el Banco Central subastaba -en lugar de vender dólares- para atenuar la depreciación de la moneda local, el sol.
Asimismo, Velarde explicó que existe una mayor liquidez porque inversores institucionales estaban retornando sus portafolios a soles y por las operaciones de inyección de liquidez del banco mediante operaciones repo.
"Hemos estado inyectando mensualmente 600 millones de soles cada dos semanas (...) La idea es un poco continuar con estos repos y los bancos están bien líquidos, entonces no había la necesidad de bajar (el encaje) en mayo", agregó.
El Banco Central recortó esta semana su previsión de crecimiento económico en el 2014 a un 5,5 por ciento, desde un 6 por ciento, debido a que el clave sector minero se expandiría menos de lo anticipado previamente.
"Estudiaremos la liquidez que tengan en mayo para ver si lo hacemos a fines de mayo o junio, pero va a depender de las condiciones de liquidez que haya", agregó.
Los encajes, o requerimientos bancarios, son un porcentaje de los depósitos que las instituciones financieras como los bancos deben mantener en efectivo en sus bóvedas o como depósitos en cuenta corriente en el Banco Central.