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LIMA, 11 May. (Notimérica/EP) -
El ex presidente de Perú, Alberto Fujimori, ha abandonado este sábado el hospital en el que fue ingresado el viernes por indicación y solicitud de los médicos del Instituto Nacional Penitenciario (Inpe), mientras su ex esposa, Susana Higuchi, sigue hospitalizada en la misma clínica por una intervención quirúrgica traumatológica a causa de un problema en la cadera.
Ex presidente y ex primera dama, divorciados desde el año 1994, coincidieron así por unas horas en la clínica 'La Luz', situada en la ciudad de Lima, adonde su hija, la ex candidata a la presidencia de Perú, Keiko Fujimori, fue a visitarlos.
A pesar de la "triste coincidencia", Keiko dijo que tenía la esperanza de que sus padres tuvieran la oportunidad de volver a hablar "después de tantos años".
Pero parece que no ha habido tiempo para ello ya que el ex mandatario fue dado de alta este mismo sábado, tras las evaluaciones médicas a las que fue sometido.
El director del hospital, José Luis Oré, dijo en rueda de prensa que Fujimori se encontraba estable si bien requiere de evaluaciones urológicas y neurológicas periódicas.
El doctor Oré explicó que Fujimori, de 75 años, fue dado de alta para que retorne a la cárcel donde cumple una pena de 25 años de prisión por delitos de lesa humanidad.
El ex mandatario peruano fue ingresado el viernes después de acudir a la audiencia por el caso de un presunto desvío de fondos de las Fuerzas Armadas al Servicio Nacional de Inteligencia, con el objetivo de comprar la línea editorial de diarios sensacionalistas para su reelección en 2000.
Según su abogado, William Paco Castillo, a Fujimori le sobrevino una crisis después de que la juez le hiciera un llamado de atención por estar anotando durante la sesión judicial a los candidatos de su nuevo partido, Avanza Frente Libertad, para las próximas elecciones municipales y regionales.
Fujimori ya ha sufrido varias crisis de salud desde que comenzó el juicio por los 'diarios chicha', el pasado 17 de octubre. La familia ha denunciado que, en parte, se debe a las "crueles condiciones penitenciarias".
La familia ya ha llamado la atención sobre el delicado estado de salud del ex dirigente en otras ocasiones. En octubre de 2012, solicitó al Gobierno de Ollanta Humala que le concediera el indulto humanitario por este motivo, aunque le fue denegado.
En aquella ocasión, incluso su ex esposa, Susana Higuchi, con la que Fujimori tuvo cuatro hijos, se mostró a favor del indulto al ex presidente porque al hacer un balance de las cosas buenas y los errores que se cometieron durante el gobierno "las cosas positivas pesan más".