Actualizado 30/06/2009 02:23

ACTUIALIZA 1-Brasil sólo reconoce Gobierno de Zelaya: Lula

BRASILIA (Reuters/EP) - El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, condenó el lunes el golpe de Estado en Honduras y dijo que no reconocerá otro Gobierno más que el del derrocado mandatario José Manuel Zelaya.

Asimismo, el Gobierno determinó que el embajador brasileño en Honduras, Brian Michael Fraser Neele, permanecerá en Brasil y no regresará a Tegucigalpa por tiempo indeterminado.

"El (Fraser Neele) estaba de vacaciones y va a permanecer en Brasil debido a los últimos acontecimientos", dijo a Reuters un portavoz de la cancillería.

Más temprano, Lula condenó el golpe de Estado del domingo y dijo que era necesario exigir la vuelta al poder de Zelaya.

"Tenemos que exigir la vuelta del Gobierno electo", dijo el mandatario a periodistas. "Sino, dentro de poco se convertirán en moda" los golpes de Estado, agregó.

El mandatario brasileño ya había condenado temprano en la mañana el derrocamiento de Zelaya durante su programa semanal de radio "Desayuno con el Presidente".

"No podemos aceptar más, en América Latina, que alguien quiera resolver su problema de poder por la vía del golpe", afirmó Lula.

El Ejército hondureño derrocó a Zelaya con el apoyo de sectores políticos que rechazan sus planes de buscar la reelección y lo llevaron a la fuerza a un avión que lo trasladó a la capital de Costa Rica.

"Zelaya ganó las elecciones, por lo tanto, él debe retornar a la presidencia de Honduras. Es la única condición para que podamos establecer relaciones con Honduras", afirmó Lula.

El presidente dijo que si el país centroamericano no revisa la situación "quedará totalmente aislada en medio de un contingente enorme de países democráticos".

Lula dijo que conversó sobre el caso con sus colegas de El Salvador, Paraguay y Chile, así como con su canciller, Celso Amorim.

El ministro de Relaciones Exteriores comunicó a la Organización de Estados Americanos (OEA) que no se pueden hacer acuerdos ni existen términos medios, ya que se tiene que condenar el golpe.

"Nosotros no podemos aceptar o reconocer cualquier nuevo Gobierno que no sea el del presidente Zelaya, porque él fue electo directamente por el voto, cumpliendo las reglas de la democracia", agregó Lula.

El domingo, la cancillería de Brasil dijo que el Gobierno condenaba "de forma vehemente" la acción militar que derrocó a Zelaya.

"Eventuales cuestiones de orden constitucional deben resolverse de forma pacífica, por el diálogo y en el marco de la institucionalidad democrática", agregó en un comunicado, demandando la "inmediata e incondicional" restitución del mandatario hondureño en sus funciones.