MADRID, 29 Feb. (EUROPA PRESS) -
El enviado de paz de Estados Unidos para Afganistán, Zalmay Khalilzad, y la delegación de negociadores de los talibán se encuentran ya en el hotel Sheraton de la capital de Qatar, Doha, para estampar su firma en un histórico acuerdo de paz y el principio, si se cumplen los mejores pronósticos, de las conversaciones entre las milicias y el Gobierno de Kabul.
"Los talibán hemos mantenido nuestras promesas y ahora toca que la otra parte cumpla con su cometido. Por eso hemos organizado la reunión de hoy", ha declarado uno de los negociadores talibán, Anas Haqqani, a la cadena afgana Tolo News. Khalilzad no ha contestado a las preguntas de los medios.
Otro enviado talibán, Shahabuddin Delawar, ha asegurado que este sábado es un "día feliz" con la firma de un acuerdo que, espera, "garantice la retirada de las fuerzas internacionales" del país.
El resto de delegaciones internacionales han comenzado a llegar este viernes, comenzando por el ministro de Exteriores de Pakistán, Mahmud Qureshi, y su homólogo uzbeco, Abdulaziz Kamilov.
"Mañana (por hoy) será un gran día para Afganistán y los afganos. Es una gran oportunidad. Afganistán se está moviendo hacia la paz y la reconciliación. Mañana se pueden sentar las bases para un diálogo inclusivo interafgano", ha hecho saber Qureshi.
El ministro de Exteriores uzbeco también declaró su pleno respaldo al acuerdo. "Queremos mucho ser optimistas primero y, en segundo lugar, por supuesto, damos la bienvenida al proceso de paz. Uzbekistán es vecino inmediato de Afganistán y en los últimos siglos, hemos mantenido una cultura humanitaria muy cercana, así como vínculos económicos, con el pueblo afgano", ha explicado.
En el hotel se encuentra ya también el enviado británico, Gareth Bayley, quien ha entendido la firma de este acuerdo como "una prueba" antes ddel verdadero obstáculo, "que los talibán demuestren que tienen la capacidad y el compromiso de iniciar negociaciones significativas con el Gobierno afgano".
LA OTAN DEMOSTRARÁ SU RESPALDO EN KABUL
Este viernes, el ministro de Defensa de Estados Unidos, Mark Esper, y el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, llegarán a Kabul para efectuar una "declaración conjunta" con el presidente afgano, Ashraf Ghani, en la que reiterarán el respaldo de la comunidad internacional al Gobierno de Afganistán en este proceso de paz, según ha confirmado la organización transatlántica en un comunicado.
La rueda de prensa tendrá lugar minutos después de la firma del acuerdo, según la nota oficial.
La firma del acuerdo ocurriría al final de una semana en la que, según fuentes de seguridad al mismo medio, los talibán han reducido significativamente sus ataques tras un acuerdo para la "reducción de la violencia" en todo el país, en un gesto de buena voluntad que el Gobierno de Estados Unidos consideraba como una condición imprescindible para concretar el acuerdo.
Una vez firmado el acuerdo, se espera que los talibán comiencen unas históricas conversaciones directas con el Gobierno afgano, a quien los insurgentes se han negado a reconocer durante dos décadas al considerar a las autoridades de Kabul como un títere de las potencias occidentales.
También se encuentra en Doha una delegación de seis miembros del gobierno afgano, elegida por completo por el presidente Ghani, para mantener los primeros contactos tras la firma del pacto con Estados Unidos.