MADRID, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
Al menos diez miembros de las fuerzas de seguridad afganas han muerto en un ataque perpetrado por los talibán a última hora del martes en la provincia de Badghis, en el oeste de Afganistán, según ha informado este miércoles la cadena de televisión Tolo, que cita a un diputado.
Según Ziauddin Akazi, el ataque se produjo en el distrito de Bala Murghab cuando las tropas afganas salían de su base para realizar una patrulla. "Siete soldados y tres miembros de las fuerzas especiales de la Policía murieron en el ataque y otros cinco resultaron heridos", ha indicado, precisando que los enfrentamientos se prolongaron durante dos horas.
Por el momento, no ha habido confirmación oficial de ataque ni los talibán tampoco han reivindicado su autoría. Este lunes, el Gobierno afgano denunció que la semana anterior había sido la más mortífera en 19 años de conflicto, ya que los talibán habían perpetrado 422 ataques que dejaron 291 agentes de las fuerzas de seguridad afganas muertos y otros 550 efectivos heridos.
Por otra parte, al menos seis civiles han muerto este miércoles por la explosión de una bomba de carretera en la provincia de Jawzjan, según ha informado el portavoz del gobernador provincial, Maruf Azar, que ha precisado que el suceso se ha producido en la localidad de Farok Qala.
Según el portavoz, el artefacto ha alcanzado un 'rickshaw' y entre los fallecidos figuran dos niños y una mujer, mientras que otro menor más ha resultado herido en el incidente. Azar ha responsabilizado a los talibán de la colocación de la mina.
Entretanto, el presidente afgano, Ashraf Ghani, se ha reunido este miércoles con el presidente del Alto Consejo para la Reconciliación Nacional, según ha informado el portavoz de la Presidencia, Sediq Sediqqi.
Ambos hombres "han hablado sobre el proceso de paz, los pasos futuros y los preparativos en el proceso en relación a la negociación directa entre el Gobierno afgano y los talibán", ha precisado el portavoz en un mensaje en Twitter.
El Gobierno afgano ha procedido a la liberación de miles de prisioneros talibán, mientras que el grupo insurgente también ha hecho lo propio con algunos de los efectivos de las fuerzas de seguridad en su poder, como gesto de buena voluntad de cara al inicio de conversaciones de paz para poner fin al conflicto en Afganistán. Mientras esto ocurre, no han cesado los ataques y las operaciones militares.