Publicado 19/05/2020 11:37

Afganistán.- La ONU denuncia el aumento de víctimas civiles a manos de los talibán y las fuerzas afganas en abril

Afganistán.- La ONU denuncia el aumento de víctimas civiles a manos de los talib
Afganistán.- La ONU denuncia el aumento de víctimas civiles a manos de los talib - 2019 GETTY IMAGES / PAULA BRONSTEIN - Archivo

La enviada de Naciones Unidas pide iniciar "cuanto antes" las negociaciones de paz entre afganos

MADRID, 19 May. (EUROPA PRESS) -

La Misión de la ONU en Afganistán (UNAMA) ha denunciado este martes el aumento en el número de víctimas civiles durante el mes de abril tanto en acciones obra de los talibán como de las fuerzas afganas y ha criticado la falta de respeto de todas las partes en el conflicto en el país asiático por el Derecho Internacional.

Según la UNAMA, los talibán son responsables de 208 víctimas civiles durante el mes de abril, un 25 por ciento más con respecto al mismo mes en 2019 y un nivel similar al mes de marzo. Por su parte, las fuerzas de seguridad afganas están detrás de 172 víctimas civiles el mes pasado, un 38 por ciento más con respecto a abril de 2019 y un 37 por ciento más con respecto al mes anterior.

"Naciones Unidas está profundamente preocupada tanto por el aumento en el daño a civiles como por el sorprendente deterioro del respeto por las partes al Derecho Internacional Humanitario, demostrados por los impactantes recientes ataques contra instalaciones de salud y las amenazas a trabajadores sanitarios, el que no se hayan tomado todas las precauciones posibles a la hora de ejecutar bombardeos aéreos y el uso de gran cantidad de explosivos en áreas pobladas por civiles", ha manifestado la UNAMA en un comunicado.

En este sentido, la representante del secretario general de la ONU en Afganistán, Deborah Lyons, ha hecho un llamamiento a "suspender los enfrentamientos y a que las partes respeten el Derecho Humanitario que está ahí para proteger a los civiles".

"Las partes se han comprometido a encontrar una solución pacífica y deberían proteger las vidas de todos los afganos y no poner en peligro la esperanza de estos en el fin de la guerra", ha añadido la también jefa de la UNAMA, subrayando que "las negociaciones de paz entre afganos deben empezar lo antes posible".

Desde el 1 de abril, la UNAMA ha documentado el secuestro de quince trabajadores sanitarios por parte de los talibán así como una amenaza a trabajadores de la salud y la confiscación de material médico por parte de las fuerzas de seguridad afganas. A esto se suma el ataque del pasado 12 de mayo contra una maternidad en Kabul respaldada por Médicos Sin Fronteras (MSF) en el que murieron 24 personas y cuya autoría no ha sido reivindicada.

En este sentido, la misión de la ONU ha recordado que los ataques intencionados contra civiles y objetivos civiles, incluidas instalaciones médicas, "pueden equivaler a crímenes de guerra".

Además, ha expresado su preocupación por los graves ataques registrados en lo que va de mayo, entre los que figuran, además del perpetrado en Kabul, uno contra un funeral reivindicado por Estado Islámico en el norte del país con 33 muertos y un bombardeo aéreo por parte de la aviación afgana que dejó al menos nueve civiles muertos.

LLAMAMIENTO A DETENER LA "GUERRA DE DECLARACIONES"

Por ello, Naciones Unidas ha instado a todas las partes a "detener la guerra de declaraciones que no está ayudando a aquellos afganos que están trabajando para que comiencen las negociaciones entre afganos lo antes posible". "En las últimas semanas, la naturaleza acusatoria y el tono beligerante de las declaraciones de todas las partes han tenido un papel negativo y poco útil", ha lamentado la UNAMA.

El Gobierno afgano y los talibán han entablado en las últimas semanas contactos previos que debían llevar al inicio de negociaciones de paz propiamente dichas, después de que los insurgentes firmaran en febrero en Qatar un acuerdo de paz con Estados Unidos que contempla la retirada de las tropas extranjeras.

Antes del inicio de dichas negociaciones, Kabul accedió a la liberación de 1.500 prisioneros talibán en su poder, de los que ya ha procedido a liberar a más de un millar, mientras que el grupo armado también ha liberado a algunos miembros de las fuerzas de seguridad.

Sin embargo, ambas partes se han acusado de incumplir lo pactado y el presidente afgano, Ashraf Ghani, anunció el 12 de mayo, tras el atentado de Kabul y el registrado en el funeral en Balj, que las fuerzas de seguridad retomaban las operaciones ofensivas contra los talibán.