Publicado 01/02/2021 09:49

Afganistán.- Los talibán niegan estar detrás de la muerte de civiles y advierten contra "descartar" el acuerdo con EEUU

Miembros de los talibán
Miembros de los talibán - PPI / ZUMA PRESS / CONTACTOPHOTO - Archivo

MADRID, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -

Los talibán han negado este lunes ser responsables de la muerte de civiles en el marco del repunte de la violencia en el que se ha visto sumido Afganistán pese al inicio de las conversaciones de paz con el Gobierno y ha recalcado que se trata de "acusaciones infundadas" contra el grupo.

"Representantes de varios países europeos y de otros lugares han presentado acusaciones infundadas sobre que el Emirato Islámico continúa una guerra sin sentido, mata a civiles, destruye infraestructura pública y está implicado en asesinatos. El Emirato Islámico de Afganistán rechaza estas acusaciones", ha señalado.

"Todos los cargos presentados son infundados. El Emirato Islámico de Afganistán no tiene responsabilidad alguna en la muerte de civiles y no está implicado en la destrucción de infraestructura pública", ha dicho el portavoz del grupo, Zabihulá Muyahid, en un comunicado publicado por el grupo a través de su página web.

Así, ha hecho hincapié en que la política de los talibán es "resolver los asuntos a través del diálogo" y ha incidido en que "la causa principal y fundamental de la crisis en Afganistán es la ocupación extranjera, a causa de la cual los afganos han muerto desde hace dos décadas, que ha impuesto una Administración impotente y que sigue dando apoyo a este régimen corrupto".

"Por desgracia, la mayoría de países, incluida la Unión Europea (UE), están implicados directa o indirectamente en las tragedias, destrucción, bombardeos, asesinatos y otros crímenes sufridos por nuestro pueblo durante los últimos 20 años, y algunos aún hacen esfuerzos para extender la presencia de las fuerzas de ocupación extranjeras en Afganistán y prolongar el conflicto", ha manifestado.

En este sentido, ha hecho hincapié en que "el Emirato Islámico tiene el derecho legal a liberar su patria de la presencia de las fuerzas ocupantes a través de todos los medios legales" y ha defendido la necesidad de aplicar el acuerdo de paz firmado en febrero de 2020 con Estados Unidos.

Muyahid ha apuntado que la aplicación de este acuerdo "se demostrará beneficiosa y en interés de Estados Unidos, el resto de países, y los afganos". "Sin embargo, si algunos descartan el acuerdo de Doha y siguen buscando excusas para continuar la guerra y mantener la ocupación, la Historia ha demostrado que la nación muyahidín afgana puede defender valientemente sus valores, tierra, patria y derechos", ha advertido.

"Nuestras afirmaciones sobre negociaciones y diálogo no deben ser explotadas ni confundidas por debilidad. Tenemos el apoyo de una nación orgullosa y libre que desea posicionarse contra todos los complots y conspiraciones extranjeras, con ayuda de Dios", ha zanjado.

El comunicado de Muyahid ha sido publicado un día después de que la UE, la OTAN y las representaciones diplomáticas de más de una decena de países, entre ellos Estados Unidos, Francia, Alemania, Italia y España, condenaran la "violencia y la destrucción selectiva" ejercida en su mayor parte por los talibán en Afganistán, que socava los cimientos de un futuro "pacífico y próspero".

Por su parte, el portavoz del Departamento de Defensa de Estados Unidos, John Kirby, alertó la semana pasada de que los talibán "no están cumpliendo sus compromisos" con el acuerdo de Doha y recalcó que la retirada de tropas antes de mayo depende de ello.

AUMENTO DE LA VIOLENCIA

Afganistán ha experimentado un repunte de la violencia durante los últimos meses a pesar del acuerdo entre los talibán y Estados Unidos en febrero de 2020 y de las conversaciones de paz entre el grupo y el Gobierno afgano, cuyas delegaciones pactaron en diciembre la 'hoja de ruta' para el proceso.

A pesar del reinicio de las conversaciones en la capital de Qatar, Doha, el Gobierno de Kabul ha descartado nuevas liberaciones de presos talibán ante el incremento de los ataques, después de que los insurgentes hayan reclamado la excarcelación de otros 7.000 miembros del grupo.

En este sentido, la capital, Kabul, ha sido escenario este lunes de un nuevo ataque con bomba, en este caso contra el vehículo de Jusnud Nabizada, jefe de la oficina del ministro de Asuntos de Paz, si bien no ha habido víctimas.

Fuentes de seguridad han detallado que la explosión ha tenido lugar en la rotonda de Shahid, en el distrito policial número diez de Kabul, tal y como ha recogido la cadena de televisión afgana Tolo TV.

Familiares de Nabizada, quien es además fundador de la agencia afgana de noticias Jaama Press, han confirmado que tanto él como sus dos hijos estaban en el vehículo en el momento de la explosión, si bien han recalcado que tanto ellos como el conductor han resultado ilesos.

La Comisión Independiente de Derechos Humanos de Afganistán (AIHRC) indicó el 27 de enero que el número de víctimas civiles a causa del conflicto en Afganistán descendió cerca de un 21 por ciento en 2020 respecto al año anterior, si bien apuntó a un drástico aumento de los asesinatos selectivos en este periodo.