Actualizado 22/03/2012 10:01

AI denuncia un aumento del acoso los periodistas en Cuba


MADRID, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -

Amnistía Internacional ha denunciado el brusco aumento en los dos últimos años del acoso y de las detenciones contra disidentes políticos, activistas de Derechos Humanos, periodistas y blogueros de Cuba.

En un nuevo informe titulado 'Represión sistemática: Acoso y detenciones breves por motivos políticos en Cuba', la organización ha denunciado que las autoridades cubanas han renovado sus maniobras para castigar a las personas que consideran opuestas al régimen.

"Las tácticas han cambiado, pero la represión en Cuba es tan intensa como siempre", ha manifestado Gerardo Ducos, investigador de Amnistía Internacional sobre Cuba, informa un comunicado de prensa.

Según la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, entre enero y septiembre de 2011 hubo 2.784 casos de abusos contra los Derechos Humanos, la mayoría detenciones breves de disidentes, eso supone 710 casos más que en 2010. Mientras, desde marzo de 2011, más de 65 periodistas independientes han sido detenidos, gran parte de ellos en más de una ocasión, indica el informe.

"Después de las liberaciones colectivas de presos de conciencia en 2011, hemos visto a las autoridades agudizar su estrategia de silenciar a la disidencia mediante el acoso a activistas y periodistas, a los que se somete a detenciones breves y a actos públicos de repudio", ha indicado Ducos.

Amnistía Internacional ha advertido de que las autoridades cubanas no toleran ninguna crítica a sus políticas realizada fuera de los mecanismos bajo control gubernamental. "Las leyes sobre 'desorden público', 'ultraje', 'desacato', 'peligrosidad' y 'agresión' se utilizan para procesar a quienes se oponen al Gobierno", afirma el comunicado, que también resalta que a ninguna organización política o de Derechos Humanos se le ha permitido obtener el reconocimiento jurídico.

"Cuba está siendo escenario de una intensificación de la represión en lo que se refiere a los Derechos Humanos", ha denunciado Ducos. "Lo que queremos es que los activistas puedan llevar a cabo su labor legítima sin temor a represalias", ha agregado.

LOS CASOS

Amnistía Internacional ha explicado que los activistas de Derechos Humanos o los periodistas independientes detenidos suelen permanecer recluidos en comisarías por unas horas o varios días, mientras son sometidos a interrogatorios, intimidación, amenazas y, ocasionalmente, palizas. Además, en muchos casos, las autoridades no informan a sus familiares de los motivos de la aprehensión ni del lugar donde se encuentran.

La ONG ha mencionado el caso de los defensores de los Derechos Humanos Antonio Michel y Marcos Máiquel Lima Cruz, quienes permanecen encarcelados desde el 25 de diciembre de 2010, cuando fueron detenidos por agentes del Departamento de Seguridad del Estado en su localidad natal de Holguín, en el este de Cuba, por entonar canciones en las que criticaban la falta de libertad de expresión en el país.

Tras un juicio sumario celebrado en mayo de 2011, fueron condenados a dos y tres años de prisión, respectivamente, por "ultraje a los símbolos de la patria" y "desórdenes públicos".

Michel sufre problemas de próstata y, según los informes, no recibe tratamiento médico adecuado. Aunque legalmente puede optar a la libertad condicional, las autoridades se han negado a responder a las peticiones de su familia y de su abogado.

Para Amnistía Internacional, los dos hermanos son presos de conciencia, por lo que ha pedido a las autoridades su liberación inmediata e incondicional, así como para los activistas de Derechos Humanos Yasmín Conyedo Riverón y su esposo, Yusmani Rafael Álvarez Esmori, detenidos desde el 8 de enero pasado por cargos "falsos de atentado contra un agente del Estado".

Otro caso resaltado por la organización es el del periodista José Alberto Álvarez Bravo, quien fue detenido 15 veces entre abril y octubre de 2011. El 12 de julio, unos agentes de seguridad del Estado lo aprehendieron en su casa y confiscaron su ordenador, unidades de almacenamiento USB, una cámara digital, libros y documentos. Permaneció detenido más de 72 horas.