Publicado 15/04/2019 19:57

Amnistía Internacional insta a Ortega a poner fin a "un año de brutal represión" en Nicaragua

El Gobierno de Nicaragua llama a la oposición a dejar el "terrorismo" y  demandó "coherencia" para recuperar el diálogo
REUTERS / OSWALDO RIVAS - Archivo

   MADRID, 15 Abr. (EUROPA PRESS) -

   Amnistía Internacional (AI) ha instado este lunes al presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, a poner fin a "un año de brutal represión", a pocos días de que se cumpla el primer aniversario del inicio de las peores protestas contra el líder sandinista en sus quince años de gobierno.

   "Durante el último año, el Gobierno del presidente Ortega ha reprimido brutal y reiteradamente a todas las personas que se han atrevido a plantar cara a su administración", ha dicho la directora Amnistía Internacional para las Américas, Erika Guevara Rosas.

   La jefa regional de AI ha denunciado que "las autoridades nicaragüenses siguen violando los derechos a la justicia, la verdad y la reparación de cientos de víctimas, al tiempo que impiden a las organizaciones de la sociedad civil y a los observadores internacionales de los Derechos Humanos trabajar libremente en el país".

   "Esto tiene que cesar", ha reclamado. En concreto, ha pedido a las autoridades nicaragüenses "poner en libertad a todos los estudiantes, activistas y periodistas a quienes se ha detenido exclusivamente por ejercer su derecho a la libertad de expresión y de reunión pacífica".

   Amnistía Internacional ha subrayado que "seguirá apoyando a todas las personas que luchan pacíficamente por sus derechos, a pesar del hostigamiento y la intimidación constantes que sufren por parte de las fuerzas de seguridad del Estado y de los grupos parapoliciales". "El valiente pueblo de Nicaragua no será silenciado", ha aseverado.

   Las protestas contra Ortega comenzaron por una polémica reforma de la seguridad social pero rápidamente se extendieron hasta exigir la "democratización" de Nicaragua.

   Más de 300 personas murieron por la represión de las manifestaciones antigubernamentales y miles fueron detenidas. AI ha afirmado que tanto la Policía como los "grupos parapoliciales" cometieron "crímenes de Derecho Internacional", incluidas ejecuciones extrajudiciales y torturas.

   Además, en estos doce meses, el Gobierno ha expulsado de Nicaragua a la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OACNUDH) y al Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) y al Mecanismo Especial de Seguimiento para Nicaragua (MESENI) y ha prohibido varias ONG locales.

   Ortega ofreció un diálogo nacional a los manifestantes que quedó en suspendo por su negativa a anticipar las elecciones presidenciales. Las negociaciones se retomaron en febrero y permitieron liberar a 150 "presos políticos", con la promesa de excarcelar a todos, si bien han vuelto a llegar a un punto muerto.