Actualizado 17/12/2013 21:18

Santos aboga por "dar una oportunidad a la paz" porque "seguir con la guerra no sería responsable"

Juan Manuel Santos en la ONU
REUTERS

Asegura que "no habrá impunidad para crímenes de guerra y de lesa humanidad" y pide el apoyo de la comunidad internacional


NUEVA YORK, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -

El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ha abogado por "dar una oportunidad a la paz" al considerar que "seguir con la guerra no sería responsable", durante el discurso que ha pronunciado este martes en la 68º sesión plenaria de la Asamblea General de Naciones Unidas.

Santos ha realizado una firme defensa del diálogo de paz con las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que comenzó el pasado 8 de octubre en Oslo y 19 de noviembre en La Habana sobre una agenda temática de seis puntos para poner fin a medio siglo de conflicto.

"Debo confesar que para mí hubiera sido fácil, como gobernante, seguir avanzando por el camino que llevábamos, porque hacer la guerra es más fácil que buscar la paz. Pero no hubiera sido responsable, porque seguir conviviendo con el conflicto sería condenar a millones de personas a muchos más años de violencia", ha dicho.

Santos ha indicado que tampoco habría sido responsable con su propia conciencia. "Porque hoy estamos ante la mejor oportunidad --tal vez la última-- de poner fin al conflicto y no podría morir tranquilo si no hago todo lo que esté a mi alcance para aprovecharla", ha explicado.

De la misma forma, ha considerado que "no sería responsable ni con América Latina ni con el mundo, dado que también sufren, de diversas maneras, los efectos del conflicto colombiano".

Así, ha confiado en que las FARC "entienda que llegó el momento de dejar atrás esta confrontación de 50 años; que llegó el momento de cambiar las balas por los votos, las armas por los argumentos; que llegó el momento de continuar su lucha, pero en democracia".

"Nuestra obligación más urgente en estos momentos es evitar que se produzcan nuevas víctimas; es acabar ya con este conflicto, para que el ciclo de violencia y de dolor no se siga repitiendo", ha sostenido, de acuerdo con prensa presidencial.

Santos ha recordado que el diálogo de paz dura ya un año, en el que solamente se ha llegado a un acuerdo --sobre desarrollo agrario y rural--, y, aunque ha confesado que es "optimista", ha señalado que "la paciencia del pueblo colombiano no es infinita".

"Las guerrillas tendrán que decidir si optan por una paz honorable y duradera, o si reinciden en la guerra. Desde acá les hago un llamado para que entiendan que la historia nos ha conducido a este momento definitivo. Es la hora de las decisiones", ha instado.

El jefe de Gobierno ha advertido de que "si salimos con las manos vacías, condenaremos a nuestra nación a muchos más años de sangre y de dolor". "¡No podemos perder esta oportunidad! ¡Las futuras generaciones y la historia no nos perdonarían!", ha estimado.

Por el contrario, ha apuntado que, una vez conseguida la paz, Colombia será imparable. "Si hemos logrado mucho, muchísimo, en medio de esta confrontación --en materia de seguridad, de lucha contra la pobreza y de desempeño económico--, cuánto más podríamos hacer sin ella", ha planteado.

"NO HABRÁ IMPUNIDAD"

El jefe de Estado ha aseverado que "Colombia quiere acabar con este conflicto sin renunciar a la justicia --ni mucho menos a la verdad y a la reparación de las víctimas--, rechazando así las críticas que apuntan a que el proceso de paz se traducirá en impunidad para la guerrilla.

"¿Cómo lograr la terminación del conflicto y al mismo tiempo el cumplimiento de nuestras obligaciones de investigación y sanción y la máxima satisfacción posible de los derechos de las víctimas?", ha cuestionado.

Santos ha respondido que en Colombia este dilema se está afrontando "con honestidad y con seriedad" a través del llamado Marco Jurídico para la Paz, "una estrategia integral de justicia transicional que atiende los principios de verdad, justicia, reparación y no repetición".

El presidente colombiano ha sostenido que "si entendemos la lucha contra la impunidad --en una transición-- como un conjunto de medidas que satisfagan a las víctimas, y no solo como la administración de procesos penales, es posible encontrar una solución para todos".

"No podemos pretender investigar todos los hechos cometidos en medio siglo de violencia y procesar a todos los responsables para no cumplir, pero podemos construir una estrategia realista y transparente que permita satisfacer los derechos de las víctimas", ha insistido.

"Y quiero ser claro: No habrá impunidad por crímenes de guerra y de lesa humanidad cometidos de manera sistemática", ha afirmado. "Por el contrario, esta es la primera vez que Colombia se toma en serio la obligación de luchar contra la impunidad", ha considerado.

Por todo ello, ha pedido a Naciones Unidas y a la comunidad internacional "que respeten el derecho de Colombia --y de toda nación-- a buscar la paz". "Pedimos que se nos siga acompañando, pero respetando nuestras decisiones, nuestra forma de hacer las cosas", ha aclarado.

"No se trata de sacrificar la justicia para lograr la paz, sino de cómo lograr la paz con un máximo de justicia. De esta manera la justicia se convierte --como debe ser-- en un apoyo y no en un obstáculo para la paz", ha argumentado.

COSTE HUMANO

Santos ha recordado que "en estos 50 años de conflicto han muerto más de 220.000 personas". "¡Eso es más del doble de las víctimas fatales que hubo en la antigua Yugoslavia, que fue una guerra abierta y despiadada que conmovió al mundo!", ha subrayado.

"Y habría que agregar a los heridos, a los mutilados por las minas antipersona, a los que han sufrido la infamia del secuestro y a los desarraigados de su propia tierra, que pueden sumar unos cinco millones de personas", ha indicado.

UNA COLOMBIA "SIN 'COCA'"

Por otro lado, ha hecho un llamamiento a la comunidad internacional, y especialmente a sus vecinos regionales, a impulsar un cambio de estrategia en la lucha contra las drogas, recordando que el narcotráfico es el principal combustible de los conflictos armados.

"Nuestro conflicto ha estado atravesado por una flecha venenosa que lo alimenta y que se alimenta de él: el narcotráfico. Esta actividad ilícita ha sido la principal fuente de financiación de la violencia y el terrorismo en mi país --y yo diría que en el mundo-- en los últimos tiempos", ha apuntado.

En lo que respecta a su Gobierno, ha explicado que ha incluido el tema de las drogas ilícitas en el diálogo con las FARC. "Si logramos que la guerrilla, una vez desmovilizada, se convierta en aliada del Estado para poner un dique al narcotráfico ¡Lo que significaría!", ha valorado.

Santos ha destacado que "una Colombia sin coca y sin conflicto era un sueño imposible que, sin embargo, ahora podemos hacer posible, para bien de los colombianos y del mundo entero".

Sobre la estrategia internacional, ha urgido a reconocer que "esa guerra no se ha ganado". "Y lo digo como presidente del país que más muertos ha puesto en esta guerra, y también el que más resultados ha obtenido en la lucha contra este flagelo", ha matizado.

"Si obramos unidos frente a la problemática de las drogas, con una visión integral que se aparte de sesgos ideológicos o políticos, ¡Cuánto daño y cuánta violencia podemos evitar! Y no hablo solo de daño a las personas, sino también a la naturaleza, porque el narcotráfico ha favorecido un un verdadero 'ecocidio'", ha concluido.