MADRID, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Argelia, Abdelmayid Tebune, ha firmado este jueves un decreto concediendo el perdón a casi 6.300 personas encarceladas en el país, apenas días después de amnistiar a cerca de 3.500 personas.
La Presidencia ha indicado en un comunicado que la medida afecta a personas condenadas a penas de 18 meses o menos o a las que les quede este periodo de pena por cumplir, según ha informado la agencia estatal argelina de noticias, APS.
Sin embargo, ha destacado que la amnistía excluye a personas condenadas por terrorismo, traición, espionaje, asesinato, tráfico de drogas, violación, malversación y corrupción.
"El número total de detenidos que se benefician de los procesos de amnistía, según los decretos presidenciales, afecta a un total de 9.765 personas", ha dicho. Así, las 6.294 beneficiadas por la medida se suman a las 3.471 de la amnistía del martes.
Estos decretos han sido publicados en el marco de las movilizaciones en el país en rechazo a Tebune y reclamando la liberación de los detenidos durante las protestas antigubernamentales del último año.
Las protestas, que arrancaron en rechazo a la intención del entonces presidente, Abdelaziz Buteflika, de presentarse un nuevo mandato, y para exigir una apertura democrática, han continuado tras la llegada a Tebune a la Presidencia después de imponerse en las elecciones de diciembre.
El nuevo mandatario tendió la mano a los manifestantes para iniciar un diálogo "serio" y puso entre sus prioridades acometer una "profunda reforma" de la Constitución del país durante su primer discurso tras imponerse en los comicios.
La victoria de Tebune fue rechazada por los manifestantes, que han continuado las movilizaciones, si bien el llamamiento al diálogo del mandatario ha provocado algunas divisiones entre ellos, dado que algunos están abiertos a esta vía para poner fin a la crisis política.
De hecho, el principal partido islamista de Argelia, el Movimiento de la Sociedad por la Paz (MSP), aceptó a finales de diciembre la oferta de diálogo con el objetivo de "contribuir a las reformas".
La formación destacó que uno de los motivos que le llevaban a participar en el diálogo era la salida del poder de 'las tres B', en referencia a Buteflika, el hasta entonces mandatario interino, Abdelkader Bensalá, y el antiguo primer ministro, Nurredín Bedui.