BUENOS AIRES, 12 Nov. (EUROPA PRESS) -
Más de 40 personas se sientan desde este lunes en el banquillo de los acusados en un tribunal argentino por su responsabilidad en presuntos delitos contra la humanidad cometidos durante la última dictadura militar en la región de Tucumán, en la zona norte del país.
La sala de Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Tucumán (TOF) ha iniciado este lunes el juicio contra 44 personas, entre ellos el exmilitar Luciano Benjamín Menéndez, que sigue la vista por videoconferencia desde la cárcel de Ezeiza, donde ya cumple condena.
El proceso se basa en hechos ocurridos entre 1976 y 1982 y que suman 235 supuestas víctimas entre las que figuran tanto desaparecidos como supervivientes. Estas personas habrían estado en los centros de detención ilegal instalados en la Jefatura de Policía y el Arsenal Miguel de Azcuénaga.
La mayoría de las víctimas que siguen vivas formarán parte de los alrededor de 600 testigos que prestarán declaración durante todo el juicio, que previsiblemente se prolongará hasta mediados del próximo año. A la primera vista han asistido asociaciones de Derechos Humanos y también familiares de los acusados que llegaron a calificar a sus parientes de "presos políticos", según 'La Gaceta de Tucumán'.