Actualizado 07/06/2010 18:44

Argentina.- Comienzan los análisis de ADN de los hijos adoptivos de la dueña de 'Clarín'


BUENOS AIRES, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Banco Nacional de Datos Genéticos de Argentina (BNDG) comenzará este lunes los análisis de las pruebas de ADN tomadas a los hijos adoptivos de Ernestina Herrera de Noble, dueña del grupo 'Clarín', para determinar si fueron niños apropiados ilegalmente durante la dictadura militar de 1976.

Las muestras de Marcela y Felipe serán cotejadas con toda la base de datos genética de Argentina que tiene el BNDG, ubicado en el Hospital Durand de Buenos Aires, según la orden emitida la semana pasada por la jueza Sandra Arroyo Salgado.

"Los materiales secuestrados posibilitarán la pronta realización del estudio pericial de histocompatibilidad, cuya concreción sin dilaciones fue ordenada expresamente por el Superior", dijo Arroyo Salgado en declaraciones a la prensa.

Los resultados que arrojen los análisis del BNDG podrían poner fin a más de 8 años de litigios por parte de los familiares, apoyados por las Abuelas de la Plaza Mayo, que aseguran que Marcela y Felipe fueron "robados" a sus padres cuando eran apenas unos recién nacidos.

El pasado 28 de diciembre Marcela y Felipe acudieron al Centro Médico Forense de Buenos Aires para suministrar las pruebas de ADN. Días después, la policía argentina registró sus viviendas en busca de más pruebas, hecho que generó fuertes controversias.

Pero la polémica se ha centrado en que las Abuelas de la Plaza de Mayo han exigido que las muestras sean cotejadas con toda la base de datos genética del BNDG y no con un grupo de personas que se estima pudiesen ser sus verdaderos familiares. Esta disputa ha retrasado hasta la fecha los resultados sobre el verdadero origen de los hijos de la mayor accionista de 'Clarín'.

"NOS PARECE INDIGNANTE"

Marcela y Felipe, que hasta el momento habían mantenido una posición discreta sobre este asunto, han hablado en los últimos días con algunos medios locales e internacionales sobre su situación actual frente a este hecho que, según ellos, ha pasado de ser un asunto humanitario para convertirse en un conflicto de carácter político.

En un comienzo, ambos habían informado a la justicia argentina de que se negaban a que sus muestras fueren comparadas con la base de datos del BNDG, lo cual fue desestimado posteriormente a través de una orden emitida por la jueza Arroyo Salgado.

Marcela, por su parte, ha asegurado que han sido víctimas de un "persecución" por parte de la Policía Federal, al recordar lo que aconteció a finales de mayo cuando salieron del juzgado y fueron rodeados por coches y motos de las fuerzas de seguridad.

"Nos leyeron una orden de requisa personal, que podía ser efectuada en la vía pública, pero como no lograron interceptar a nuestro auto lo hicieron adentro de la casa", relató la mujer al diario 'Clarín'.

"A nosotros nos parece indignante, porque nos dicen que nos quieren cuidar, que nosotros somos las víctimas que quieren cuidar que no tengamos ninguna clase sufrimiento y en realidad nos están exponiendo porque nosotros nos tuvimos que quitar la ropa delante de 7 personas", lamentó Marcela.

ORÍGENES

Marcela y Felipe fueron adoptados en 1976, pero hace unos 20 años dos familias han asegurado que la familia Noble realizó el trámite de manera ilegal por tratarse de dos niños que fueron apartados de sus padres durante la represión militar.

Según las denuncias, Felipe sería hijo de María del Carmen Gualdero de García, secuestrada en junio de 1976 cuando tenía nueve meses de gestación. Al parecer, nació en uno de los campos de prisioneros donde tenían recluidos a los disidentes.

La supuesta verdadera familia de Felipe espera confirmar su identidad para entregarle un poema que le escribió su madre, dos meses antes de ser llevada por los militares.

Marcela, por su parte, podría llamarse en realidad Matilde. Sus supuestos padres, Bárbara Miranda de Lanuscou y Roberto Lanuscou, fueron asesinados junto a sus dos hermanos después de que un grupo de soldados asaltaran su casa en septiembre de 1976.

Los familiares dicen que la única sobreviviente de este hecho violento fue Matilde que apenas tenía seis meses de vida. Las investigaciones apuntan a que la niña fue sacada de la vivienda por los militares y llevada a un lugar no precisado donde posteriormente fue adoptada.