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Reclama una solución al conflicto con Gran Bretaña por la soberanía de las islas Malvinas
NUEVA YORK, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
La presidenta argentina, Cristina Fernández, reclamó esta noche en la Asamblea anual de las Naciones Unidas, una reforma del Consejo de Seguridad ya que en su opinión "se ha demostrado absolutamente antifuncional y obsoleto, no solamente en la cuestión siria, sino en otros incidentes contra la paz en el mundo".
Además, en su intervención ante la 68ª Asamblea anual de la ONU, Fernández de Kirchner habló de los fondos 'buitre'; del caso AMIA, y del conflicto con Gran Bretaña por la soberanía de Las Malvinas.
La mandataria argentina, que ya propuso en agosto la reforma de Consejo de Seguridad que le tocó presidir, volvió a reclamar una reforma de este organismo para que no se vuelva "un obstáculo en la resolución de conflictos" como el de la crisis de Siria. "No hay guerras justas; sólo la paz es justa", subrayó.
Asimismo, la mandataria emplazó al nuevo Gobierno de la República de Irán para que apruebe el tratado para interrogar a los imputados por la justicia argentina en la voladura de la AMIA.
En su intervención, Fernández también se refirió a la polémica en torno a los llamados 'fondos buitre' y consideró "insólito" el caso que se dirime en la Justicia estadounidense contra dichos fondos ya que señaló que "de haber defaulteado la deuda, ahora no nos quieren dejar pagarla".
Al respecto opinó que Argentina es "víctima" de la reglas no escritas de los calificadores de riesgo, de los derivados financieros, de los fondos buitre, y advirtió de que "esta es la historia de Argentina pero puede ser la historia de cualquier otro país en muy poco tiempo".
La mandataria recordó la frase del ex secretario del Tesoro de Estados Unidos, Paul O'Neill, quien --dijo-- en 2001 negó ayuda a la Argentina porque consideró que "los herreros y carpinteros norteamericanos no debían pagar la fiesta de los argentinos".
"Yo digo que los millones de argentinos que recuperaron trabajo, que volvieron a tener ilusiones, los científicos que volvieron al país, los chicos que volvieron a tener educación, tampoco tienen que pagar la fiesta de los lobbystas, que tienen poder para hacer tambalear el sistema financiero internacional", criticó.
SOLIDARIDAD CON VÍCTIMAS DEL TERRORISMO
Cristina Fernández expresó ante la asamblea anual de las Naciones Unidas su "solidaridad con las víctimas del atentado de Kenia, también de Pakistán, y en general de todas las víctimas de los atentados terroristas que se producen en distintas partes del mundo", y recordó que la Argentina "junto a Estados Unidos de América, son los únicos dos países del continente americano que sufrieron ataques terroristas".
Respecto a la cuestión en Siria, la Jefa de Estado se refirió al Consejo de Seguridad de la ONU y señaló que "resulta bastante incomprensible que se hayan dado cuenta que en Siria había un conflicto, recién el día 21 de agosto".
Cristina Frenández remarcó que "Siria viene con un conflicto desde hace más de un año y medio, han muerto 150.000 personas, y el 99,99% de esas personas han muerto por armas convencionales, no por armas químicas", afirmó.
"Se habla de armas químicas como si estuviéramos por primera vez ante un fenómeno de armas de devastación masiva", apuntó. Y recordó entre otros hechos las cámaras de gas de los nazis, el "holocausto" nuclear en Nagasaki e Hiroshima, o el uso de napalm o fósforo en la guerra de Vietnam.
"También recuerdo, para ser justa, el dolor de la sociedad norteamericana viendo abrir el vientre de sus aviones y bajar en bolsas negras los cadáveres de los soldados que habían ido a pelear a alguna parte del mundo", mencionó. Y remarcó: "Cuanta irracionalidad. No hay guerras justas; sólo la paz es justa".
CONFLICTO DE LAS MALVINAS
Cristina Fernández afirmó que Argentina es "un país muy respetuoso de las normas escritas del derecho internacional" y recordó que es firmante del tratado de no proliferación nuclear, "siendo la Argentina uno de los países con mayor desarrollo nuclear en América Latina. Lo hacemos con fines pacíficos", apostilló.
En ese sentido, criticó la actitud de algunas potencias como Gran Bretaña: "No andamos condenando el uso de la energía nuclear con fines de guerra, y andamos enviando submarinos nucleares, como nos sucede a los argentinos con nuestros conflicto por Malvinas, donde el Reino Unido militariza el Atlántico Sur", criticó.
La presidenta reclamó la necesidad de "acabar con el doble standard" y que las decisiones de este organismo "se cumplan a rajatabla, para grandes y para pequeños". "Lo estamos esperando desde 1965, cuando el plenario de la asamblea y del comité de descolonización, obligaron a la Argentina y al Reino Unido a sentarse a dialogar, porque hay una controversia de soberanía sobre territorio malvinense", afirmó.
Pero advirtió que pese a todas las resoluciones no hubo avances sobre la cuestión de Malvinas. Y afirmó: "Así seguimos con estos dobles standards, que algunos no les gustan que se nombren, pero que son como las brujas: que las hay, las hay", concluyó.