Actualizado 17/06/2013 15:21

Argentina.- Liberado el maquinista del tren accidentado, aunque seguirá imputado por su responsabilidad en el choque


BUENOS AIRES, 17 Jun. (EUROPA PRESS) -

El maquinista argentino Daniel López, que conducía el tren accidentado el pasado jueves en Castelar, en el cono urbano de Buenos Aires, en el que murieron tres personas, ha sido puesto en libertad tras declarar ante la justicia, aunque seguirá estando imputado por "estrago doloso seguido de muerte".

El conductor declaró el domingo ante el juez Jorge Rodríguez, al que aseguró que ni el freno principal ni el de emergencia del tren funcionaron. Además, explicó que ya le habían "llamado la atención" por conducir despacio. El otro maquinista, contra el que chocó el tren, Raúl Ahumada, fue liberado sin cargos.

La abogada del maquinista imputado, Valeria Corbacho, fue la encargada de explicar el testimonio de su cliente y por qué había tenido problemas con la empresa por ir despacio. "Eso lo describe como un conductor cuidadoso", aseguró la letrada, según el diario 'Clarín'.

"El freno principal no respondió en dos oportunidades. Luego activó el de emergencia, que también falló. Al ver la cola de la formación que estaba detenida adelante, López repitió las maniobras de freno, y como seguían sin funcionar, se corrió de su pupitre y se preparó para el impacto, en ningún momento salió de la cabina", apostilló.

El Gobierno señaló directamente al conductor por el accidente y ha intentado en los últimos días asegurar que no se produjo ningún fallo técnico. El sábado, el Ejecutivo mostró una serie de fotos en las que aparece el acelerador colocado hasta el máximo y en las que supuestamente se comprobaría que no se utilizó el freno de emergencia.

La abogada Corbacho le ha defendido ante la justicia. "Hizo muchas maniobras para intentar frenar, la posición de los comandos no es indicativo de nada. López es padre de cuatro hijos y él mismo atiende un comedor comunitario, no subió al tren a matarse", comentó.

El accidente, que también dejó en total 315 heridos, se produjo a primera hora de la mañana del jueves, cuando un tren embistió a unos 62 kilómetros por hora a otro convoy que se encontraba parado en la vía en el mismos sentido. Los dos estaban llenos de pasajeros.

El Ejecutivo se ha empeñado en separar este nuevo siniestro de la tragedia de la Once, el accidente ferroviario ocurrido en Buenos Aires en febrero de 2012 y en el que murieron 51 personas, que ha provocado una cascada de dimisiones en el Gobierno de la presidenta, Cristina Fernández.