Publicado 15/10/2020 18:54

Armenia/Azerbaiyán.- Ereván insiste en la autodeterminación de Nagorno Karabaj pero Bakú descarta cruzar esa línea roja

Un hombre camina por una calle de Stepanakert, capital de Nagorno Karabaj
Un hombre camina por una calle de Stepanakert, capital de Nagorno Karabaj - CELESTINO ARCE LAVIN / ZUMA PRESS / CONTACTOPHOTO

MADRID, 15 Oct. (EUROPA PRESS) -

El primer ministro de Armenia, Nikol Pashinian, y el presidente de Azerbaiyán, Ilham Aliyev, han vuelto a dejar claras este jueves sus posturas enfrentadas respecto a la región de Nagorno Karabaj, de mayoría armenia y que autoproclamó su independencia de Bakú con el respaldo de Ereván, alejando así una solución pacífica al conflicto que se reanudó el pasado 27 de septiembre.

En una entrevista paralela mantenida con el grupo de medios ruso Rossiya Segodnya, Pashinian ha recalcado que para Armenia "el derecho a la autodeterminación de Nagorno Karabaj es una 'línea roja' que no podemos cruzar", al tiempo que ha lamentado que Azerbaiyán "no quería y no quiere aceptar el derecho de los armenios de Nagorno Karabaj a la autodeterminación".

El primer ministro armenio ha confiado en que le gustaría que "el conflicto de Nagorno Karabaj se resolviera definitivamente sobre la base de un consenso y que encontráramos una solución aceptable para todas las partes: Armenia, Nagorno Karabaj y Azerbaiyán".

Sin embargo, Aliyev ha advertido de que Azerbaiyán no está dispuesto a reconocer la independencia de esta región bajo ninguna circunstancia. "En lo referente a las 'líneas rojas' (...) bajo ninguna circunstancia permitiremos violar la integridad territorial de Azerbaiyán", ha sostenido.

El presidente azerí ha asegurado que este es el mensaje que han hecho llegar a Francia, Estados Unidos y Rusia, los tres países que copresiden el Grupo de Minsk dentro de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), que intenta mediar desde hace años en el conflicto. "Bajo ninguna circunstancia reconocerá Azerbaiyán la independencia de Nagorno Karabaj", ha insistido.

Según Aliyev, Bakú sigue fiel a su compromiso de resolver el conflicto partiendo de los principios básicos definidos por el Grupo de Minsk, los cuales, ha dicho, prevén "la liberación de las regiones ocupadas de Azerbaiyán en un plan por etapas". "Se trata de los principios básicos que Azerbaiyán siempre respetó y que él mismo desarrolló", ha sostenido.

PAPEL DE TURQUÍA

Por otra parte, Pashinian ha denunciado el papel de Turquía, principal aliado de Azerbaiyán, en el conflicto. Según el primer ministro armenio, "los militares turcos están involucrados no solo en la coordinación de las misiones militares sino también actúan directamente sobre el terreno".

En su opinión, es "obvio" que Turquía "es el principal patrocinador" del conflicto. "Por decisión de Turquía y bajo su patrocinio se tomó la decisión de desatar la guerra y lanzar un ataque contra Nagorno Karabaj", ha señalado, denunciando además que "hay pruebas concretas de que unos terroristas de Siria" trasladados por Turquía también están participando en los enfrentamientos.

"Lo importante es entender el porqué", ha subrayado el primer ministro, para quien, "obviamente, el Ejército de Azerbaiyán es incapaz de combatir contra el Ejército de Defensa de Nagorno Karabaj y es por eso que Turquía decidió involucrar a terroristas".

Asimismo, según recoge la agencia Sputnik (que forma parte del grupo mediático), Pashinian ha asegurado tener datos de la presencia de "unas unidades especiales del Ejército de Pakistán" en las hostilidades.

Ante las acusaciones formuladas por su rival, Aliyev ha insistido en que no hay mercenarios de Siria y Libia en las filas azeríes. "Nuestra posición oficial es que no tenemos mercenarios extranjeros", ha asegurado, esgrimiendo que hasta ahora nadie ha presentado pruebas de lo contrario.

Los combates en Nagorno Karabaj se reanudaron el pasado 27 de septiembre y se han extendido desde entonces a zonas fuera de dicha región en ambos países. Hasta el momento, decenas de militares de ambos bandos, pero también de civiles, han muerto en los enfrentamientos.

Tras reiterados llamamientos desde la comunidad, en particular por parte del Grupo de Minsk, Armenia y Azerbaiyán acordaron el viernes en Moscú un alto el fuego humanitario que entró en vigor el sábado con vistas a permitir el intercambio de prisioneros y la entrega de los caídos en combate. Ambas partes se han acusado mutuamente desde entonces de incumplirlo y los ataques y bombardeos no han cesado.