MADRID, 7 Jun. (EUROPA PRESS) -
El ministro de Exteriores de Venezuela, Jorge Arreaza, ha tildado este viernes de "fracaso" la política "intervencionista" de Estados Unidos en el país sudamericano, después de que el secretario de Estado norteamericano, Mike Pompeo, reconociera dificultades a la hora de unificar a la oposición.
"La innegable confesión de Pompeo al confirmar que su política intervencionista para unir a la oposición siempre fracasa, es grave", ha dicho Arreaza en un mensaje publicado en su cuenta en la red social Twitter.
Asimismo, ha resaltado que "es incluso mas patético ver a la propia oposición excusarse con Pompeo y prometerle que ahora sí se van a unir". "Reconocen su rol de peones", ha remachado.
En sus declaraciones, publicadas por el diario estadounidense 'The Washington Post' tras un encuentro a puerta cerrada, Pompeo dijo que "el acertijo, que es mantener unida a la oposición, ha demostrado ser diabólicamente difícil".
"En el momento en el que (el presidente venezolano, Nicolás) Maduro se vaya, todos van a levantar y decir: 'Elígeme a mí, soy el próximo presidente de Venezuela", señaló, según la grabación obtenida por el diario.
Así, el secretario de Estado estadounidense manifestó que "habría más de 40 personas que creen que son el legítimo sucesor de Maduro" al frente del Estado venezolano.
La crisis política en Venezuela se agravó el 10 de enero, cuando Maduro decidió iniciar un segundo mandato que no reconocen ni la oposición ni gran parte de la comunidad internacional porque se basa en los resultados de unas elecciones presidenciales, las del 20 de mayo de 2018, que consideran fraudulentas.
En respuesta, el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, se autoproclamó "presidente encargado" el 23 de enero con el triple objetivo de "cesar la usurpación", crear un "gobierno de transición" y celebrar "elecciones libres". Ha sido reconocido por Estados Unidos, la mayoría de los países latinoamericanos y muchos europeos, incluido España.
A raíz de la asonada militar del 30 de abril, la situación se ha complicado y Gobierno y oposición han accedido a mantener contactos exploratorios en Noruega con el propósito de reanudar un diálogo que se ha resistido estos años. De momento, no ha dado más resultado que el compromiso de las partes de seguir hablando.