Actualizado 07/07/2009 00:02

Aumenta en Cuba la entrega de tierras a privados

Por Marc Frank

LA HABANA (Reuters/EP) - Cerca de 30.000 cubanos se sumaron este año a las filas de los agricultores en la isla, en momentos en que Cuba intenta superar una crisis agrícola, informó el lunes el periódico estatal Trabajadores.

Las autoridades cubanas iniciaron en octubre pasado el arrendamiento de 1,69 millones de hectáreas de tierras ociosas, entregando pequeñas parcelas a trabajadores, agricultores privados, cooperativistas y empresas estatales.

La entrega de tierras ociosas es parte de los esfuerzos del presidente Raúl Castro por reformar el sector y aumentar la producción de alimentos.

El periódico Trabajadores dijo que hasta el 3 de julio habían sido entregadas 78.113 parcelas de tierra, frente a las 45.000 otorgadas en enero pasado.

"Un estudio de las tierras estatales ociosas arrojó 1,69 millones de hectáreas, de las cuales se han entregado 689.697, el 41 por ciento", precisó Trabajadores.

El Gobierno cubano no había otorgado tierras a gran escala desde poco después de la revolución de 1959, que nacionalizó grandes propiedades agrícolas y entregó algunas parcelas de tierra de los pequeños agricultores.

Hasta que comenzó el programa de entrega de tierras, Cuba tenía alrededor de 250.000 granjas familiares y 1.100 cooperativas privadas, que representaba menos de un tercio o el 70 por ciento de la tierra del país.

AGRICULTORES VEN RESULTADOS

Varios agricultores dijeron que el programa había tenido resultados visibles, aunque estimaron que tomó demasiado tiempo tener las tierras una vez concedidas.

"Me encanta ver cómo se transforma lo que era un marabuzal en comida, pero a otros que les dieron tierras aún no han podido ocuparlas por cuestiones de organización", dijo por teléfono Alfredo Estévez, un campesino de la central provincia de Camagüey.

Trabajadores dijo que unos 56.000 agricultores con contratos de arrendamiento ya están produciendo las tierras.

Castro, que sustituyó en la presidencia de Cuba a su enfermo hermano Fidel en febrero del 2008, se ha enfrentado a una crisis agrícola que ha llevado a importar entre el 60 y el 70 por ciento de los alimentos que consume y al malestar de muchos por los altos precios en comparación con los bajos salarios.

El Gobierno, que controla más del 90 por ciento de la actividad económica, entrega a los cubanos una ración de alimentos fuertemente subsidiados que debe completar en los mercados donde una libra de carne cuesta más que el salario promedio de un día.

Para llevar a casa un poco de lechugas, tomates y un mango, los cubanos deben gastar casi el salario de un día.

Los cubanos reciben servicios de salud y educación gratuitos y otras prestaciones sociales son altamente subsidiadas, pero el salario promedio es de unos 20 dólares al mes.

Como parte de su programa de reformas, Raúl Castro descentralizó la toma de decisiones en la agricultura y elevó los precios a los productos que el Estado compra a los campesinos.

Expertos locales y extranjeros dijeron que era demasiado pronto para juzgar el éxito de la reforma de la agricultura, pero cuestionaron el que el Estado siga monopolizando los suministros agrícolas y distribuyendo lo que se produce en la isla.