Michelle Bachelet
REUTERS / JAIME SALDARRIAGA

   TOKIO, 26 Feb (Notimérica/Notimex).-

   La presidenta de Chile, Michelle Bachelet, finalizó hoy su visita a Japón, su última gira en el extranjero como mandataria. La jefa de Estado, quien durante su visita a Japón condenó en dos oportunidades los ensayos nucleares de Corea del Norte y realizó una visita a Nagasaki, fue recibida este lunes por el emperador Akihito en su residencia.

   El encuentro protocolar, al que la prensa no tuvo acceso, fue una de las últimas actividades de la jefa de Estado en este país asiático, que fue elegido por el Gobierno para poner término a las giras internacionales de Bachelet como presidenta.

   Este lunes, además, la gobernante conoció en un hotel de la capital nipona al robot japonés de simulación médica 'Mikoto', que permite entrenar a los estudiantes de medicina y médicos en intervenciones de mediana y alta complejidad.

   De acuerdo con lo explicado en la oportunidad, el ingenio japonés permite mejorar la realización de procedimientos médicos y optimizar la calidad de atención a los pacientes.

   Bachelet se reunió luego en forma privada con la gobernadora de Tokio, Yuriko Koike, quien le realizó una presentación sobre los Juegos Olímpicos Tokio 2020, tras lo cual se dirigió al aeropuerto para abordar el avión presidencial chileno que la llevará de regreso a Santiago.

   La gobernante, quien inició el pasado jueves su visita a Japón, se reunió durante su estadía en este país con mujeres destacadas y fue recibida por las máximas autoridades del Estado, entre ellas el primer ministro Shinzo Abe.

   En una declaración a la prensa tras esa cita, Abe puntualizó que "hemos confirmado por ambas partes (Chile y Japón) la necesidad de elevar al máximo la presión sobre Corea del Norte por todos los medios que se encuentran a nuestro alcance".

   Entre ellos mencionó "la plena aplicación de las resoluciones del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas para obligar a Corea del Norte, país que persiste en desarrollar armas nucleares y balísticas, a efectuar un cambio en su política".

   Bachelet, en tanto, precisó que "analizamos con mucho detalle la realidad de las regiones a las cuales pertenecemos, respecto de Asia pusimos especial énfasis en el análisis de los desafíos que plantea la política de Corea del Norte".

   Subrayó que existe una "firme posición conjunta a favor del desarme y la no proliferación nuclear, materias en las que Japón y Chile mantienen una permanente cooperación, y la enérgica condena de Chile frente al tipo de situaciones que hemos vivido y visto en los últimos tiempos".

   Bachelet también participó en un encuentro entre empresarios de ambos países, y el pasado sábado se desplazó hasta la ciudad de Nagasaki, que en agosto de 1945 fue devastada por una bomba nuclear lanzada por Estados Unidos.

   Tras su visita a lugares que conmemoran la tragedia, la presidenta chilena dijo que "Nagasaki es el símbolo de que ojalá aquí se haya lanzado la última bomba atómica de la historia".

   "Hemos tenido la oportunidad de visitar el Museo de la Bomba Atómica, lo que nos ha permitido conocer en detalle la historia vivida aquí, el horror, ese lanzamiento de esa bomba que tiñó de negro la historia de la humanidad", indicó.

   Enfatizó que "el recuerdo de las victimas de Nagasaki nos debe llevar a redoblar los esfuerzos para asegurar un mundo más humano y más prospero para todos".

   En ese marco, Bachelet señaló que "hemos expresado nuestro enérgico rechazo a los ensayos nucleares y de misiles que se han llevado a cabo hace poco en la vecina Corea del Norte, acciones que nos parece representan una amenaza a la paz y estabilidad para esta región, pero también para toda la humanidad".

   La visita oficial de la mandataria chilena a Japón fue realizada en el marco de la conmemoración de los 120 años del establecimiento de relaciones diplomáticas entre ambos países, que se cumplieron el año pasado.

   Japón es el cuarto socio comercial de Chile (tras China, Estados Unidos y Brasil), con un intercambio comercial que llegó a ocho mil 395 millones de dólares el año pasado, un 18 por ciento más que en 2016, con una balanza favorable al país sudamericano.