Actualizado 08/06/2009 20:04

Baja préstamo bancario en Japón, se amplía mecanismo de crédito

Por Tetsushi Kajimoto

TOKIO (Reuters/EP) - El crecimiento del préstamo bancario en Japón cayó en mayo a mínimos en siete meses, ya que las firmas dejaron de acumular dinero y se hizo más fácil obtener fondos a través de los mercados de capital, pero la desaceleración también sugiere una preocupante caída en la demanda por financiamiento.

Las empresas necesitaron menos dinero debido a que están reduciendo sus gastos de capital ante la perspectiva de que la demanda global no regrese muy pronto a los niveles vistos antes de la crisis económica, generando problemas para la economía en el corto plazo.

El balance de los prestamos pendientes en poder de los bancos japoneses subió un 3,1 por ciento en mayo en comparación con el año anterior, su menor incremento desde octubre, después de mostrar un salto récord del 3,6 por ciento en diciembre y enero.

La restricción en los mercados financieros japoneses se ha moderado a niveles vistos antes de la quiebra del banco estadounidense de inversión Lehman Brothers en septiembre, que estremeció a los mercados de todo el mundo.

"La reacción inicial a la crisis parece haber terminado. Pero las ventas de las empresas podrían no retornar a los niveles vistos antes de la quiebra de Lehman", dijo Yoshimasa Maruyama, un economista de Itochu Corp.

La emisión de bonos corporativos también se ha recuperado en meses recientes. Tan sólo la semana pasada se emitieron 693.000 millones de yenes de este tipo de bonos.

Hasta hace pocos meses, la emisión de papeles de obligaciones comerciales estuvo en descenso por diferentes razones, ya que los inversionistas se abstenían de comprar por temor a imprevistas quiebras corporativas, dijeron los analistas.

Para apoyar a estos mercados, el Banco de Japón se comprometió a comprar hasta 3 billones de yenes (31.000 millones de dólares) en papeles comerciales y el Gobierno ofreció prestamos para las pequeñas empresas como parte de un paquete de estímulos.

Por otra parte, el número de compañías japonesas que entró en quiebra disminuyó en mayo en comparación con el mismo mes del año pasado por primera vez en 12 meses, según indicó una compañía privada de investigación, en otra señal de que la recesión económica en Japón podría estar tocando fondo.

Del mismo modo, la confianza entre los trabajadores del sector servicios, como conductores de taxi, personal de hoteles y empleados de restaurantes -llamados "vigilantes de la economía" por su cercanía a las tendencias del consumidor y las ventas minoristas- también subió a su nivel más alto en un año en mayo.

El índice de acciones Nikkei trepó a un máximo de ocho meses después de que los datos de empleo en Estados Unidos superaran las expectativas y aumentaran las esperanzas de una recuperación.

Pero los analistas sostienen que aunque los mercados financieros están mostrando cierta normalidad, la economía real necesitará más tiempo para recuperarse.

Probablemente los fabricantes japoneses demoren sus inversiones en plantas y equipamiento hasta que el comercio global crezca más rápidamente, y eso podría demorar la recuperación de Japón.

Datos del lunes también revelaron que el superávit de cuenta corriente del país cayó en un 54,5 por ciento en abril en comparación con un año atrás, ya que las exportaciones se mantuvieron bajas y los ingresos por inversión flaquearon.