Actualizado 06/06/2009 10:00

BALONCESTO-Kobe busca un nuevo momento de gloria en la NBA

Por Steve Ginsburg

LOS ANGELES (Reuters/EP) - La inusual muestra de emociones de Kobe Bryant durante los "playoffs" del baloncesto de la NBA es el resultado de un ardiente deseo por ganar el campeonato y no se debe a una agenda oculta, dijo el viernes el jugador escogido para el partido de las estrellas.

El levantar el puño y los enfados son gestos comunes en la NBA, pero no cuando se trata de Bryant -el jugador más valioso del año 2008-, quien apenas parpadea después de convertir lanzamientos que deciden un partido.

Bryant dijo que no estaba intentando acallar el debate sobre quién es el mejor jugador de la NBA, ni que estaba entusiasmado al intentar ganar su primer título sin Shaquille O'Neal.

"Sólo estoy concentrado y listo para jugar", dijo a periodistas.

"En términos de como afecta a mis compañeros, ellos probablemente me observan y ven como respondo a la situación, como me preparo, y me siguen", agregó.

Bryant anotó el jueves 40 puntos contra Orlando Magic en la aplastante victoria por 100-75 en el partido inicial de la final de la NBA, que se define en una serie al mejor de siete encuentros, en la que el jugador de 30 años abandonó su usual estoicismo y jugó con la emotividad de un novato.

Aunque fue golpeado por los comentarios del ex gerente general de los Lakers Jerry West sobre que LeBron James, de Cleveland, es ahora el mejor jugador de la liga, Bryant dijo que no estaba intentando demostrar nada.

CONCENTRADO

"Sólo lo deseo tanto", dijo Bryant, quien se acerca a su cuarto título. "Las últimas dos veces que hemos estado en las finales no lo logramos. En esta oportunidad estamos realmente concentrados", agregó.

Algunas personas han dicho que Bryant nunca podrá ganar un título de la NBA sin la presencia del gigante O'Neal, uno de los más grandes centros de la historia de la liga y con quien jugó durante ocho temporadas en los Lakers.

"Para nada", dijo Bryant cuando un periodista le preguntó si eso había tenido algo que ver con su estilo de juego animado. Pero reconoció que sus hijos "me dicen gruñón, como en los siete enanos. Un cascarrabias", agregó.

Bryant admitió que le gustaría redimirse después de la derrota de los Lakers en seis partidos ante Boston Celtics en las finales del año pasado.

Iniciando esa tarea de la mejor manera posible, el jugador escogido 11 veces para el partido de las estrellas anotó 16 de sus 34 tiros desde el campo en el encuentro del jueves contra los Magic, agregando ocho rebotes y ocho asistencias.

Las 19.000 personas en el Staples Center gritaron aprobando el juego apasionado de Bryant e incluso recibió un gesto de aprobación con el pulgar del ganador del Oscar Jack Nicholson.

El segundo partido se disputará el domingo en Los Angeles antes de que la serie vaya a Florida para los próximos tres encuentros, antes de volver a California para los últimos dos, en casos de que sean necesarios.

Bryant dijo que sus emociones se habían estado "acumulando".

"Me he estado controlando todo el año, esperando que llegasen estos playoffs", afirmó. "El tablero está listo", agregó.