LA PAZ, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente Evo Morales decretó ayer la aplicación de una subvención de hasta el 25% sobre el recibo de la luz de los bolivianos que consuman menos de 70 kilowatios al mes en las ciudades y por debajo de los 30 kilowatios al mes en áreas rurales, una iniciativa enmarcada en la denominada 'Tarifa Dignidad' y que beneficiará a cerca de 2,4 millones de personas.
La disposición nace del acuerdo de alianza estratégica firmado por el ministro de Obras Públicas de Bolivia, Salvador Ric, con 16 eléctricas del país, empresas de transporte y grupos dedicados a la comercialización de este producto, que aceptaron subvencionar la disposición gubernamental durante su primer año de vigencia.
La suscripción de la alianza fue presenciada por el presidente Morales y representantes de las empresas en el Palacio de Gobierno, donde el jefe de Estado boliviano destacó que la medida es "una reparación histórica a los más pobres, que sufrieron las consecuencias del modelo económico neoliberal", según informaciones del diario local 'La Razón' recogidas por Europa Press.
Morales dijo que los efectos del decreto gubernamental deberán comprobarse en las facturas que lleguen a los hogares el próximo abril, en las que se reflejará el consumo de este mes de marzo. La medida beneficiará a unos 480.000 hogares, 375.000 urbanos y 104.000 rurales, que representan el 37% de los ciudadanos que actualmente tienen acceso al servicio eléctrico en Bolivia.
El acuerdo de subsidio tiene una vigencia de cuatro años. En el primer año, el coste será de 34,1 millones de bolívares (unos 3,5 millones de euros) y hasta la cuarta gestión llegará a costar 41,7 millones de bolívares (unos 85,7 millones de euros) que serán asumidos por las 16 operadoras a nivel departamental (provincial), urbano y rural.
Adicionalmente, las empresas privadas aceptaron anular el denominado 'cargo fijo' que aparecía en las facturas mensuales de electricidad como una obligación del usuario, que pagaba para que las empresas cubrieran 'gastos operativos' por la visita de los inspectores que se encargaban de la lectura del medidor de consumo eléctrico y de la elaboración, transporte y entrega de facturas a domicilio.
Empresas como Electropaz en La Paz; Elfec en Cochabamba; CRE en Santa Cruz, Elfeo en Oruro; Sepsa en Potosí y Cessa en Sucre cubrirán el grupo de consumidores de hasta 70 kilowatios al mes.
En el grupo dos se encuentran los usuarios de hasta 30 Kilowatios al mes, que son atendidos por empresas del Sistema Integrado Nacional pero que trabajan en sistemas aislados como Coserelec, Emprelpaz, Seysa, ENDE Cobija, Setar, Cooperativa Riberalta, Cooperativa Punata, Cooperativa Caracollo y otros rurales.
Las empresas que aceptaron firmar el acuerdo por "un principio de responsabilidad social" son Guaracachi; Corani; Valle Hermoso; Compañía Boliviana de Energía Eléctrica; Compañía Eléctrica Central Bulo Bulo; Hidroeléctrica Boliviana; Empresa Río Eléctrico; Sociedad Industrial, Energética y Comercial Andina. Asimismo, lo hicieron la transportadora Electricidad S.A y la empresa encargada de la interconexión eléctrica ISA Bolivia.
Antes de la aparición de este decreto regía la 'Tarifa Social', dispuesta por el Gobierno de Carlos Mesa y que solamente contemplaba a usuarios con consumo de hasta 50 Kilowatios al mes, que llegó a 281.000 hogares de las ciudades del eje central, un subsidio financiado por los consumidores mayores.
La diferencia es que ahora se amplió en 20 Kilowatios al mes y se incorporó a más hogares urbanos y rurales. Además, el subsidio será financiado por las empresas eléctricas consideradas "agentes del Mercado Eléctrico Mayorista" de sus propios recursos.
El gerente general de la empresa Guaracahi, Jaime Aliaga, la más grande del país con asiento en Santa Cruz, explicó que las empresas ayudarán de acuerdo a su capacidad económica y sus aportaciones serán prorrateados por la Superintendencia de Electricidad, que les indicará el monto de participación en la subvención de la 'Tarifa Dignidad'.