Publicado 18/11/2019 20:11

Bolivia.- Áñez suspende un viaje a su Beni natal por las amenazas de un "grupo criminal"

La autoproclamada presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez
La autoproclamada presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez - REUTERS / MARCO BELLO

MADRID, 18 Nov. (EUROPA PRESS) -

La autoproclamada presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, ha tenido que suspender un viaje que tenía previsto realizar este lunes a su Beni natal debido a las amenazas recibidas de un "grupo criminal", según ha informado su ministro de Gobierno, Arturo Murillo.

"Hemos identificado un grupo criminal que quiere atentar contra la presidenta y, por eso, hoy día hemos tenido que parar su viaje a su tierra natal", ha anunciado Murillo en una rueda de prensa.

El portavoz gubernamental ha indicado que "ha sido muy difícil poder convencer a la presidenta de que no vaya a Beni", confesando que hasta ha amenazado con dimitir si Áñez no entraba en razón. "Yo la entiendo (...), por el amor por su tierra y su pueblo", ha justificado.

Interrogado sobre dicho "grupo criminal", Murillo ha indicado que podría estar vinculado al narcotráfico, si bien ha rehusado dar más detalles. "Por detrás de la insurrección y la sedición está el narcotráfico", ha afirmado.

Áñez esperaba poder viajar este lunes a Beni para conmemorar el 177 aniversario de la creación de este departamento boliviano, según informa ABI. "Somos orgullosos de pertenecer a esta tierra promesa de ventura, paz y unión. Hoy, me siento más Beniana y Boliviana que nunca. ¡Felicidades Beni!", ha escrito en Twitter la presidenta interina.

CRISIS POLÍTICA

Las protestas en Bolivia estallaron tras las elecciones presidenciales del pasado 20 de octubre, en las que Evo Morales proclamó su victoria pero la oposición denunció un "fraude gigantesco". La Organización de Estados Americanos (OEA) hizo una auditoría del proceso electoral en la que halló "irregularidades".

Morales dimitió el pasado 10 de noviembre y huyó a México, donde está en calidad de asilado político. Áñez, segunda vicepresidenta del Senado, se proclamó presidenta interina para llenar el vacío de poder dejado por el líder indígena y la renuncia de otros altos cargos.

Ni Morales ni sus seguidores reconocen a Áñez porque consideran que su estancia en el Palacio Quemado es fruto de un "golpe de Estado". Ella, por su parte, ha aseverado que solo estará en el cargo el tiempo necesario para convocar nuevas elecciones.