Actualizado 22/07/2013 01:08

Bolivia.- Bolivia es el segundo país en linchamientos populares, según su defensor del Pueblo

Defensor del Pueblo boliviano
ROLANDO VILLEGAS

LA PAZ, 21 Jul. (EUROPA PRESS) -

El defensor del Pueblo de Bolivia, Rolando Villegas, aseguró este domingo que el país andino ocupa el segundo lugar mundial en la práctica de esta forma de justicia comunitaria y pidió políticas públicas más "enérgicas" para frenar los linchamientos.

"El problema está en la educación" porque "la gente responde de una u otra manera a viejas prácticas autoritarias", explicó Villegas en una entrevista para el diario boliviano 'Página Siete'. "Hay que reconocer que en Bolivia el conjunto de nuestras culturas están imbuidas por visiones y prácticas autoritarias", añadió.

El defensor aseguró que, según los estudios que maneja, Bolivia sólo es superada por Guatemala en este asunto. En lo que va de año, unas 10 personas han muerto linchadas en el país: quemados, ahorcados e incluso enterrados vivos. Incluso en muchos barrios periféricos de La Paz, "es común apreciar muñecos colgados a las torres de electricidad, con advertencias de "ladrón pillado será quemado", compartió preocupado.

Villegas atribuyó parte del problema a las deficiencias, lentitud e insatisfacción con la Justicia a la hora de castigar a los culpables y en la "educación recibida". "El paso entre esta tradición (el linchamiento) y una cultura democrática es lento y todavía se cree que está bien que si alguien comete un delito sea la comunidad la que le dé una sanción ejemplarizadora", indicó.

La solución para el defensor pasa por "equilibrar" la tradición con la justicia ordinaria por la que se podría sancionar pero "nunca jamás quitar la vida", agregó. "Hay un alto grado de insatisfacción con el acceso a la justicia, por eso el linchamiento es como el trámite más rápido" para impartir Justicia, argumentó.

Consideró, además, que muchas personas no son capaces de comprender "los cambios políticos ocurridos en el país en los últimos años y mantiene un criterio desfavorable sobre el acceso a la justicia y el cumplimiento de la Ley", justificó.

De acuerdo con cifras oficiales, en Bolivia ocurren entre 10 y 20 linchamientos por año. La institución argentina Fundar detectó 64 casos en el país entre 2002 y 2003.