Actualizado 29/07/2009 02:13

Bolivia dice negocia nacionalización con eléctricas

LA PAZ (Reuters/EP) - El Gobierno de Bolivia está negociando con varias generadoras de electricidad, controladas por capitales extranjeros, su pronta nacionalización, dijo el martes el ministerio de Hidrocarburos y Energía.

Se trata, entre otras, de la eléctrica Corani, de Ecoenergy International, subsidiaria de la francesa GDF Suez; Guaracachi, de la empresa británica Rurelec PLC y Valle Hermoso, manejada por un grupo internacional denominado Bolivian Generating Group.

"Estas negociaciones tienen por objeto recuperar para el Estado estas empresas estratégicas que son parte de la cadena productiva de electricidad", dijo en un comunicado el ministerio.

"Este proceso se está ejecutando mediante una serie de actividades acordadas con los representantes de las sociedades capitalizadoras y, durante las negociaciones preliminares, se contempla una etapa de valoración que está en pleno desarrollo", agregó.

Guaracachi, Corani y Valle Hermoso son las mayores generadoras del país -producen casi el 50 por ciento de la oferta eléctrica del mercado boliviano- y surgieron a mediados de la década de 1990 de la privatización de la estatal Empresa Nacional de Electricidad (ENDE).

"Con los resultados de la valoración, el Estado iniciará la etapa de negociación final y cierre de acuerdos a objeto de cumplir con los mandatos del Plan Nacional de Desarrollo y la Nueva Constitución Política del Estado", afirmó el ministerio en su comunicado.

La nacionalización de las tres generadoras eléctricas había sido anunciada varias veces por el presidente Evo Morales en el último año, pero no se habían divulgado hasta ahora planes más concretos.

En cada una de las tres generadoras privatizadas en la década pasada, el 50 por ciento de acciones más el control administrativo están en manos de socios capitalizadores, en tanto que poco menos de la mitad restante está en manos de dos fondos privados de pensiones, en representación de los ciudadanos bolivianos.

El presidente Morales, quien buscará la reelección en el marco de una nueva Constitución "plurinacional" puesta en vigencia en febrero, impulsa un "socialismo comunitario" que arrancó en el 2006 con la nacionalización de la industria de hidrocarburos, que exporta gas natural a Argentina y Brasil.

Un mayor control estatal sobre la minería, estrictos controles sobre las exportaciones agroindustriales y una redistribución de tierras a favor de indígenas figuran también entre los cambios ejecutados por Morales, un seguidor del mandatario venezolano Hugo Chávez.