LA PAZ, 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
Miles de manifestantes rindieron ayer su particular homenaje a los fallecidos en la masacre de la provincia boliviana de Pando, ocurrida en octubre de 2003, tras iniciar su movilización el pasado lunes y dedicar a su llegada a la localidad de Porvenir un minuto de silencio por los asesinados por sicarios presuntamente al servicio de la Prefectura regional.
Los líderes de las distintas organizaciones sociales que acudieron a la marcha señalaron en sus intervenciones que la lucha de octubre de 2003 sentó el proceso de cambio y que, a su juicio, hoy en día defiende el presidente Evo Morales, según informó la Agencia Bolivariana de Noticias. Este proceso, añadieron, quedará consolidado con la aprobación del proyecto de la nueva Constitución.
Algunas ONG señalan que 74 personas murieron durante la masacre, extendida durante semanas, y alrededor de 400 resultaron heridas. "Este pueblo siempre ha defendido la unidad del país, la democracia, lo que seguimos defendiendo hasta hoy", sostuvo el presidente de la Coordinadora Nacional para el Cambio, Fidel Surc, uno de los oradores.
Por su parte, una mujer campesina de Pando pidió "que se haga justicia y se apruebe la Constitución" y denunció que algunas comunidades de la región aún viven amenazadas.