El presidente toma la medida tras acusar a algunas ONG de recibir dinero de USAID para conspirar contra su Gobierno
LA PAZ, 21 Mar. (EUROPA PRESS) -
El presidente boliviano, Evo Morales, anunció que se fiscalizará la gestión económica que hacen las ONG que operan en Bolivia, tras denunciar que algunas de esas entidades son financiadas por la agencia de ayuda internacional estadounidense USAID con la condición de conspirar contra su gobierno legalmente constituido.
"Yo quiero decirles de manera pública y ante ustedes, el Gobierno ha decidido fiscalizar a esas ONG para saber cómo están manejando esa plata, cómo están en una campaña sucia", afirmó ayer Morales, según informan hoy los medios locales.
Morales indicó que el Estado tiene la obligación de controlar cómo se invierte el dinero de la ayuda estadounidense y, en el caso de USAID, cómo canaliza el dinero procede de los ciudadanos estadounidenses.
El presidente hizo estas declaraciones tras denunciar nuevamente que algunas ONG son financiadas por Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), con la condición de impulsar campañas en contra de su administración.
Morales dijo que él mismo había constatado personalmente que la ayuda de algunas ONG se ejecuta sin ningún tipo de control y dejan muchas dudas en el trabajo que desarrollan en el territorio boliviano. "Yo he revisado los documentos (de las ONG), mucha plata. ¿Dónde se acaba la plata del pueblo?", se preguntó el mandatario.
La investigadora americano-venezolana Eva Golinger reveló el pasado fin de semana, según informa la agencia oficial boliviana ABI, que los partidos políticos de derecha en Bolivia son financiados por USAID con fines conspirativos. La abogada basó su denuncia en una minuciosa revisión de informes de USAID y del Fondo Nacional para la Democracia financiado por el Congreso de Estados Unidos y que es supervisado por el Departamento de Estado.
Estas entidades, dijo, directamente o a través de ONG financiaron y financian a partidos de derecha para concretar un golpe de Estado contra el Gobierno del presidente venezolano Hugo Chávez como el frustrado intento de febrero de 2002. Golinger indicó que, aunque esa asonada no se concretó, continúa la financiación a través de entidades dedicadas al supuesto fortalecimiento de la democracia y una agresiva cadena mediática nacional e internacional.
En Bolivia, USAID invierte al año 89 millones de dólares, de los que 27 millones están destinados a proyectos, a través de siete ONG, para estudios políticos, apoyo a la democracia y a la reforma judicial. Hay otras 52 ONG que trabajan en temas de salud, medioambiente y desarrollo económico, mientras que los otros 62 millones de dólares están destinados a temas de seguridad y lucha contra el narcotráfico.
En agosto del año pasado, el propio ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, había revelado desvíos de millonarios fondos de USAID para patrocinar acciones de grupos opositores al Gobierno boliviano, por lo que fue emplazada a ajustarse a las políticas de Estado o dejar el país. Según Quintana, hasta esa fecha, 89 millones, de 134 millones de dólares provenientes de la cooperación de Estados Unidos, financiaron a sectores opositores al gobierno de Morales.
La respuesta entonces de USAID fue el silencio, aunque el embajador estadounidense, Philip Goldberg, desestimó esas denuncias y afirmó que su país continuará brindando cooperación al país, que podría alcanzar los 120 millones de dólares en 2008.