Publicado 24/08/2020 06:31

Bolivia.- Morales considera que las últimas denuncias del Gobierno en su contra buscan dividir al MAS

Bolivia.- Evo Morales recurrirá su inhabilitación como candidato electoral
Bolivia.- Evo Morales recurrirá su inhabilitación como candidato electoral - GETTY/RICARDO CEPP - Archivo

MADRID, 24 Ago. (EUROPA PRESS) -

El expresidente de Bolivia Evo Morales (2006-2019) ha asegurado que las últimas denuncias que el Gobierno ha presentado contra él buscan la división dentro del Movimiento al Socialismo (MAS) de cara a las próximas elecciones del 18 de octubre y en las que su candidato, Luis Arce, parte en principio como favorito.

"La derecha golpista no puede dividirnos, compañeros y compañeras. Si entramos a la división, estamos entrando al juego de la derecha; ellos nos quieren destrozados", ha afirmado en una conversación para los micrófonos de la emisora radiofónica Kawsachun Coca.

Morales se ha referido al nuevo proceso penal, de los ocho que ya tiene, presentado contra él por el nuevo oficialismo, una denuncia por una supuesta relación sentimental que habría mantenido con una menor de edad, y se ha preguntado cuántos más habrá.

"No comparto el uso de compañeras en cuestiones políticas", ha dicho Morales en referencia a la denuncia presentada por el viceministro de Transparencia Institucional de Bolivia, Guido Melgar, quien le acusa de un supuesto delito de "estupro" y "tráfico de personas".

Morales ha recordado que durante las elecciones de 2014 ya se vio en una situación similar, cuando una "compañera", Gabriela Zapata, presentó una demanda de paternidad contra él.

"Algunos miembros del Ministerio Público me llaman y me dicen ¿cómo es esto? Yo dije, si tienen pruebas, procésenme. En esa demanda de la señora, no había nada. Es el proceso nueve", ha dicho en referencia a la última denuncia del Gobierno.

En ese sentido, Morales ha explicado que las acusaciones vertidas en su contra por Melgar tienen fines políticos de cara a las próximas elecciones, en las que el MAS partía como favorito, según los sondeos que se celebraron antes de que estallase la crisis sanitaria.

Morales ha recordado que estas nuevas acusaciones se suman a las más de 50 que ya hay sobre la mesa de la formación política, entre ellas una por estafa contra Arce, así como un centenar contra líderes sociales y sindicales por las recientes protestas por la postergación de las elecciones para el 18 de octubre.

El propio Arce denunció al Gobierno "golpista" de la presidenta interina, Jeanine Áñez, de estar llevando a cabo una "cacería judicial contra dirigentes obreros y campesinos".

"Denunciamos ante la Comunidad Internacional y organismos de Derechos Humanos, la cacería judicial que está llevando adelante el Gobierno golpista de Bolivia contra dirigentes obreros y campesinos. Añez habla de pacificación, pero en los hechos recrudece la persecución y represión al pueblo", denunció Arce en su cuenta de Twitter.

Bolivia se encuentra actualmente en medio de una crisis social y política desde las pasadas elecciones, cuando la oposición, tras denunciar supuestas irregularidades en la victoria de Morales, aupó a la Presidencia a Jeanine Áñez, quien ocupa el cargo de interina hasta los próximos comicios, finalmente fijados para el 18 de octubre tras haber sido pospuestos en varias ocasiones por la crisis del coronavirus.

En las últimas semanas, la situación en las calles se ha recrudecido después de que la fecha electoral fuera aplazada una última vez, generando disturbios y bloqueos por parte de algunos sindicatos, movimientos sociales, y seguidores de Morales, quienes ven en esto una estrategia del nuevo oficialismo para desgastar al que es favorito en las elecciones, el candidato del Movimiento al Socialismo (MAS), Luis Arce, poniendo como excusa la crisis de la pandemia.