Actualizado 17/03/2016 18:48

El juez defiende las escuchas a Rousseff y la compara con Nixon

Dilma Rousseff
REUTERS

Rousseff advierte de que "los golpes comienzan así" y amenaza con acciones judiciales

BRASILIA, 17 Mar. (EUROPA PRESS) -

El juez Sergio Moro, que investiga la trama corrupta en Petrobras, ha defendido las escuchas a la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, asegurando que su aforamiento no la protege de las investigaciones judiciales y recordando a este respecto el caso del ex presidente estadounidense Richard Nixon y el Watergate.

Moro ha emitido este jueves una breve resolución en la que aclara que la interceptación de las comunicaciones de Rousseff "tenía autorización legal" y "había causa justa". "Por lo que no veo mayores problemas en lo ocurrido", ha dicho.

El titular del Juzgado Federal 13º de Curitiba ha explicado que "la circunstancia de que el diálogo tenga por interlocutor a una autoridad con un foro privilegiado no altera el cuadro, pues el interceptado era el investigado", es decir, el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva.

"Además, ni el mismísimo mandatario supremo de la República tiene un privilegio absoluto en el resguardo de sus comunicaciones (...), pudiendo ser citado el conocido precedente del Tribunal Supremo de Estados Unidos en el caso contra Nixon", ha señalado.

Moro ha respondido así a las críticas de Rousseff, que ha acusado al juez federal de realizar "escuchas ilegales", en "una flagrante violación de la ley y de la Constitución" contra la que --ha avanzado-- adoptará "medidas judiciales".

"Los golpes comienzan así", ha advertido Rousseff. "Convulsionar a la sociedad brasileña con mentiras, métodos turbios y prácticas criticadas viola los principios y las garantías constitucionales, viola el derecho de los ciudadanos y abre precedentes gravísimos", ha indicado.

LAS ESCUCHAS

Moro ha divulgado este jueves la transcripción de una conversación telefónica entre Rousseff y Lula en la que, al parecer, ambos maniobran para evitar que el ex presidente sea detenido por su presunta implicación en la trama corrupta de Petrobras.

"Estoy mandándote a Bessias (Jorge Rodrigo Araujo Messias, jefe adjunto de Asuntos Jurídicos) junto con el papel, para que puedas tenerlo y usarlo en caso de necesidad", le dice Rousseff a Lula, en alusión al documento que le acredita como miembro del Gobierno.

Además, el juez federal ha indicado que "en algunas conversaciones telefónicas hablan de cómo influir o pedir ayuda a los fiscales o los tribunales a favor del ex presidente".

ACOSADOS

Lula ha sido investido este jueves jefe de la Casa Civil, un día después de que Rousseff confirmara que se incorporaría al Gobierno con "los poderes que sean necesarios" para llevar adelante su trabajo, centrado en superar la crisis política y económica.

De esta forma, Lula se ha convertido en aforado, lo que significa que las pesquisas relativas al ex mandatario dirigidas por Moro por su presunta implicación en el escándalo de la petrolera estatal pasarán ahora al Tribunal Supremo.

Lula fue detenido brevemente el pasado 4 de marzo para ser interrogado sobre la propiedad de un tríplex ubicado en el Edificio Solaris, un condominio de lujo de Sao Paulo construido por el grupo de ingeniería OAS, involucrado en el escándalo de corrupción de Petrobras.

Los investigadores creen que Lula es el verdadero dueño del apartamento y que lo habría recibido como pago por ejercer su influencia en la adjudicación de los contratos públicos de Petrobras, de acuerdo con la prensa local.

Las investigaciones contra Lula han aumentado la presión sobre el Rousseff, también cuestionada por 'Lava Jato' y objeto de un proceso de juicio político por maquillar las cuentas públicas de 2014. Millones de brasileños se han manifestado estos días para exigir su dimisión.