Actualizado 13/08/2013 20:35

Brasil.- Las protestas contra el alcalde de Río acaban con enfrentamientos con la Policía


BRASILIA, 13 Ago. (EUROPA PRESS) -

La Policía Militar actuó la pasada noche con contundencia sobre unas 300 personas que se congregaron a las puertas de la sede del gobierno de Río de Janeiro para protestar contra el alcalde de la ciudad, Sergio Cabral, al que consideran responsable de las malas y "dolorosas" políticas que se llevan haciendo en la ciudad con motivo de la celebración de la Copa del Mundo de fútbol de 2014.

Los enfrentamientos se produjeron cuando la Policía expulsó a 30 profesores del Palacio Guanabara, sede de la gobernación de la ciudad, después de la reunión que habían mantenido con el vicealcalde Luiz Fernando Pezao, según ha publicado el portal de noticias brasileño 'Estadao'.

Los docentes fueron arrastrados hasta la calle donde una vez allí fueron agredidos, según han relatado, con gas pimienta. Esto acabó por desencadenar la trifulca entre manifestantes y agentes antidisturbios, que emplearon además balas de goma en respuesta a las piedras que fueron arrojadas contra ellos.

Los docentes, en huelga desde el día 9 de agosto, se reunieron con Pezao y el subsecretario de Educación Antonio Nieto. Insatisfechos con las negociaciones, un grupo de profesores decidió permanecer en el edifico gubernamental a modo de protesta. En respuesta fueron sacados a la fuerza por la Policía Militar.

"Fui golpeado y sacado violentamente", dijo un profesor de historia llamado Fernando Pinheiro. "Arrastraron a las personas, les tiraron del pelo e incluso pegaron a las mujeres", afirmó el coordinador general del Sindicato Estatal de los Profesionales de la Educación, Alex Trentino.

Pocas horas después de los enfrentamientos, el Gobierno de Brasil emitió una nota criticando la acción de "grupos radicales", que no solo "no están interesados en el diálogo y en la democracia", sino que además "solo apuestan por el caos".

La manifestación se saldó con varios heridos y un detenido por lanzar piedras a los agentes de policía, además de diversos mobiliario urbano damnificado por la violencia que se desató durante la misma.