Actualizado 19/03/2015 11:11

Rousseff lanza un paquete de medidas anticorrupción en medio del escándalo de Petrobras

Dilma Rousseff não tem interesse em restringir manifestações
Foto: REUTERS

BRASILIA, 19 Mar. (EUROPA PRESS) -

   La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, ha lanzado este miércoles un paquete de medidas anticorrupción en medio del escándalo de Petrobras, asegurando que se enorgullece de ser la mandataria que dará los primeros pasos para conseguir una "nueva moral pública".

   El paquete de propuestas, integradas en los documentos enviados ante el Congreso, incluyen la criminalización del uso de 'cajas B' para financiar campañas electorales, la congelación de bienes de personas condenadas por corrupción y de funcionarios que acumulen unas riquezas que no se correspondan con sus ingresos.

   "Ya no somos el país que presumía de ser un pueblo al que le gustaba disfrutar de todo. Tenemos que alejarnos de esa visión utilitarista de las relaciones sociales", ha dicho Rousseff, según ha informado el diario brasileño 'O Globo'.

   "Tenemos que crear una nueva moral pública republicana, igualitaria y democrática en los derechos civiles. Sé que es un trabajo que llevará más de una generación, pero estamos orgullosos de haberlo iniciado", ha agregado.

   "Quiero por lo menos tener el orgullo de ser la presidenta que dé los primeros pasos de forma más efectiva para la construcción de este proceso", ha manifestado, recalcando que el trabajo de fortalecimiento de las instituciones y las leyes para combatir la corrupción se inició en 2003, en el primer año de gobierno del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.

   Así, Rousseff ha asegurado que las autoridades "están purgando unos males que existen desde hace siglos". "Así como la mancha cruel de la esclavitud todavía muestra profundas cicatrices en las desigualdades sociales en el país, el sistema patrimonial de poder que transforma en privado el mecanismo de control de lo público nos ha dejado una herencia nefasta de mal uso del dinero público", ha argumentado.

   Por su parte, el ministro de Justicia, José Eduardo Cardozo, ha defendido la apertura de un diálogo con todos los sectores de la sociedad, anunciando la creación de un grupo de trabajo para analizar las propuestas sobre el tema. "Brasil tiene hoy un Gobierno que no tolera la corrupción", ha zanjado.