Actualizado 27/04/2006 04:54

Brasil.- Sentencian a 18 años de prisión a un campesino por el asesinato de la misionera Dorothy Stang


BELEM (BRASIL), 27 Abr. (EP/AP) -

Un campesino del Amazonas fue condenado el miércoles a 18 años de prisión por su participación en el asesinato de la monja estadounidense Dorothy Stang en el 2005.

Amair Feijoli da Cunha, de 38 años, dijo a un jurado que, actuando por encargo de los hacendados Vitalmiro Moura y Regivaldo Galvao, ofreció dinero a dos pistoleros para matar a la monja de 73 años.

Al cabo del juicio, que duró un día, el jurado de cinco hombres y dos mujeres rechazó el argumento de la defensa, de que Feijoli actuó obligado por hacendados sin escrúpulos que amenazaron con matarlo y a quienes debía dinero.

Los dos hacendados han sido acusados, pero han logrado aplazar su juicio mediante maniobras legales.

"No podíamos pedir nada mejor", dijo David Stang, hermano de la víctima, quien viajó desde Colorado Springs, Estados Unidos, para asistir al juicio. "Esta es una pieza importante, pero quedan varias piezas, queremos que las apelaciones de los hacendados se resuelvan rápidamente y queremos que estén en la cárcel hasta que enfrenten a un jurado".

David Stang, de 63 años, asistió con sus hermanas Marguerite Hohm, de 73, y Mary Heil, de 77.

Stang, brasileña nacionalizada que procedía de Ohio, Estados Unidos, pasó los últimos 23 años de su vida en la remota aldea amazónica de Anapu, 2.000 kilómetros al norte de Río de Janeiro, donde defendía la selva y a los colonos pobres.

Fue asesinada el 12 de febrero del 2005 en un camino fangoso en el corazón del Amazonas, tras una disputa con hacendados locales que querían talar una selva para construir allí, y que ella intentaba que se declarara reserva para el desarrollo sostenible.

Feijao declaró que Galvao le dijo: "Hasta que pongamos fin a esta mujer, no tendremos paz en estas tierras". Declaró que Galvao le dijo que ofreciera el equivalente de 24.000 dólares para matar a la monja. Feijoli añadió que el revólver calibre .38 usado en el crimen pertenecía a Moura.